Una pareja estadounidense apuntó con sus armas a manifestantes mientras el grupo se dirigía a la casa de la alcaldesa de San Luis (Misuri) para exigir su renuncia.
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Una pareja de la ciudad San Luis, situada en el estado de Misuri, apuntó ayer domingo con un rifle semiautomático y una pistola a los manifestantes que pasaban a frente de su casa para dirigirse a la residencia de la alcaldesa de la urbe, Lyda Krewson.


Los abogados Mark y Patricia McCloskey, sosteniendo un rifle y una pistola, respectivamente, se enfrentaron a un grupo de unos 300 indignados después de que estos abrieran la verja de acceso al barrio.

Los activistas, parte del movimiento "Black Lives Matter" (La vida de los negros importa), iban en dirección a la casa de la alcaldesa para exigirle su renuncia después de que Krewson, en una sesión informativa realizada el viernes, diera a conocer los nombres y direcciones de las personas que sugirieron retirar la financiación del Departamento de Policía local para poner fin a la brutalidad policial contra la comunidad negra.

Sin embargo, un portavoz de la alcaldesa, en una entrevista con la cadena local KMOV TV, dijo que Krewsonse había disculpado reconociendo su error, pero que no tenía absolutamente ninguna intención de renunciar.

Las marchas en curso contra la injusticia racial y los casos de brutalidad policial en el país norteamericano se intensificaron después de la muerte de George Floyd, un afroamericano desarmado, asesinado el pasado 25 de mayo por un agente blanco que le presionó la rodilla sobre el cuello por más de ocho minutos.

Desde el primer momento, las protestas en EE.UU. se han enfrentado con la represión policial y la intolerancia del mandatario del país, Donald Trump, quien exigió reprimir con dureza a los descontentos.