Si España no se fue al carajo en la pasada crisis fue precisamente porque todavía queda estructura familiar tradicional. Abuelos cuidando a nietos frente a jornadas precarias de los padres, madres que pueden seguir con sus carreras gracias a padres acogiendo a hijos desahuciados...
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Pero ahora lo moderno es decir que la familia tradicional es el objeto del neoliberalismo. Lo que hay que leer. No tienen vergüenza. Luego que por qué asciende la ultraderecha entre la clase obrera y tal. No va de ser conservador, va de ser consecuente.

Va de que mirar a Estados Unidos es mirar a un país donde los sujetos más precarizados de todo el estrato social, más allá del racismo, son los siguientes: inmigrantes y MADRES solteras. Pregúntense por qué estas últimas y qué tiene el feminismo liberal de culpable en todo ello.

Precisamente, cualquier nuevo estudio sobre desesperación y precariedad en Estados Unidos arroja la paradoja latina, donde las tasas de muertes ligadas a suicidio, alcoholismo, opiáceos etc. sorprendentemente son menos altas en esa comunidad que en la blanca o la negra debido a las estructuras familiares tradicionales de apoyo, algo replicado del modelo hispánico. A su vez, también existe dicha paradoja en la tasa de mortalidad infantil y durante el parto. Aún no se explican cómo la comunidad latina, igualmente castigada, sigue sin arrojar los datos de la afroamericana. Expertas lo achacan a las fuertes estructuras familiares y de apoyo de es comunidad, algo que no se da en las demás. Pero eh, que la familia tradicional es el mal ahora. El siguiente paso será renegar de tener abuelos para ser verdaderamente progre.

Helena Villar es una periodista independiente que trabaja actualmente para RT