Traducido por News Front

El lunes 27 de julio se cumplió el 67 aniversario de la firma del armisticio que puso fin a la Guerra de Corea (1950-53). El líder norcoreano Kim Jong-un pronunció un discurso frente a veteranos de guerra en Pyongyang para marcar la fecha.

Kim Jong-un
© REUTERS / KCNA
El lunes, durante un discurso en el 67 ° aniversario del fin de la Guerra de Corea (1950-53), el líder norcoreano Kim Jong-un dijo que las armas nucleares del país son un elemento disuasorio «confiable y efectivo» y una garantía sólida para la seguridad de la nación, según la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA).

Kim declaró que Corea del Norte ha tratado de convertirse en «un estado nuclear» con «poder absoluto» en un intento por evitar otra guerra en la península, y que ahora el país ha construido este tipo de disuasión.

«Ahora nos hemos cambiado a un país que puede defenderse de manera confiable e inquebrantable contra la presión de alta intensidad y las amenazas militares y el chantaje de los reaccionarios imperialistas y las fuerzas hostiles», dijo Kim Jong-un, citado por Associated Press. «No volverá a haber guerra en esta tierra y nuestra seguridad nacional y nuestro futuro estarán garantizados de manera firme y permanente gracias a nuestra disuasión nuclear autodefensiva confiable y efectiva».

Las declaraciones del jefe de estado norcoreano se produjeron en medio de conversaciones estancadas con Estados Unidos sobre la situación en la península coreana y la posibilidad de desnuclearización.

A fines de junio, el subsecretario de Estado de Estados Unidos, Stephen Biegun, dijo que aún había tiempo para que Washington y Pyongyang reanudaran las conversaciones y «hicieran un progreso sustancial».

A principios de julio, Pyongyang dijo que no tenía la intención de negociar con Washington en medio de la esperanza de una cumbre antes de las elecciones estadounidenses, expresada por el presidente surcoreano Moon Jae-in, según KCNA.

Según AP, se espera que Corea del Norte evite las conversaciones con la administración Trump antes de las elecciones presidenciales de Estados Unidos en noviembre con la esperanza de ver a un nuevo ocupante en la Casa Blanca.

Jong-un y Trump han celebrado tres cumbres uno a uno, una en Singapur en 2018 y dos en 2019; en Vietnam y en la zona desmilitarizada entre Corea del Norte y Corea del Sur. Los dos líderes discutieron el estado de las cosas en la península de Corea y la posibilidad de desnuclearización. Ninguna de las cumbres logró alcanzar sus objetivos declarados, ya que el presidente de EE. UU. No logró convencer a Pyongyang de que renunciara a sus armas nucleares, mientras que la demanda de la nación asiática para aliviar las sanciones de EE. UU.