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Juan Miranda, vocero de la Asociación de Pequeños Agricultores de La Unión, señaló que visitó la plantación de esta familia que reside en el sector costero y pudo evidenciar que la perdida fue total, avaluada en cerca de 8 millones de pesos.
Agregó que la pérdida incluyó plantaciones de cilantro, rabanitos y frutillas que resultaron destruidos en su totalidad, eso sí, precisó, este fue el único huerto que sufrió con los granizos, lo que encuentra inexplicable.
Por ello, esperan contar con las autoridades para apoyar a la familia que perdió su sustento económico, considerando que este periodo es de cosecha y, por ende, el de mayor ingreso. Sobre todo porque en el caso de esta plantación, no podrán ver los frutos del esfuerzo de todo el año.
Pese a que la radio intentó ponerse en contacto con el área de comunicaciones de la Gobernación del Ranco, al cierre de esta edición no recibimos respuesta.
Comentario: Además de las catástrofes naturales que devastan el crecimiento de las cosechas, la respuesta insensata a la crisis del coronavirus y la pérdida de valor de la moneda en las naciones occidentales, en particular, han convertido la producción, la disponibilidad, la compra y la distribución de alimentos en un problema mundial de primer orden, como no se había visto en generaciones.