La aparición de seis pies mutilados en Canadá adquiere dimensión mundial y provoca bromas macabras.

Imagen
© Desconocido
Si la policía canadiense no tenía bastante con intentar resolver el misterio de la periódica aparición de pies humanos en las playas del Pacífico, ahora se enfrenta a un macabro bromista que abandonó la pezuña de un perro, dentro de un calcetín, para confundir a los investigadores.

El pasado lunes, la policía anunció el descubrimiento del quinto pie mutilado en poco menos de 11 meses. Dos días después, el hallazgo de lo que en un principio se pensó era la sexta extremidad humana despertó, aún más si cabe, la atención del público, la prensa nacional e internacional y los expertos.

Pero, al parecer, el creciente misterio sobre los pies mutilados que periódicamente aparecen en los alrededores de la isla de Vancouver, en la costa del Pacífico del país, también ha atraído a pesados bromistas sin demasiados escrúpulos.

El jueves, los servicios forenses de la provincia de Columbia Británica -conocidos por sus siglas en inglés BCSS- explicaron indignados que el sexto hallazgo era sólo una broma pesada.

"El servicio forense, un patólogo forense y un antropólogo han examinado la zapatilla y los restos y han concluido que una pezuña animal fue introducida dentro de un calcetín y empaquetada con algas secas", afirmó BCSS a través de un comunicado.

Todos son derechos, menos el último

El primer pie, derecho, fue encontrado por un excursionista el 20 de agosto del 2010 en la isla de Jedidah, un tranquilo paraje situado entre la isla de Vancouver y el territorio continental de Columbia Británica. Seis días después, otro pie mutilado apareció a unos 50 kilómetros al sur del primero, en la isla de Gabriola.

Si la aparición de dos pies en tan poco espacio de tiempo y tan cerca el uno del otro no era suficiente misterio, el hecho de que los dos fueran del lado derecho, prácticamente del mismo tamaño y en ambos casos calzados con zapatillas deportivas empezó a despertar la atención de muchos.

El tercer pie, también del lado derecho, fue localizado en la isla de Valdez, a menos de cinco kilómetros de la isla de Gabriola, el 8 de febrero de este año. El 22 de mayo, el cuarto apareció en la isla de Kirkland, situada en la desembocadura del río Fraser y a unos 45 kilómetros al este de la isla de Gabriola.

Finalmente el quinto pie fue descubierto el pasado 16 de junio a sólo un kilómetro del cuarto. En este último caso era del lado izquierdo pero el tamaño era idéntico al de los restantes hallazgos. A pesar de que ha pasado casi un año desde que apareció la primera extremidad humana, la policía no ha conseguido explicar qué está provocando la súbita llegada a las playas del Pacífico de los pies mutilados.

Hay algunas teorías, ninguna oficial

De hecho, la policía no ha ofrecido ni siquiera teorías para saciar la curiosidad del público. Y el silencio policial ha desatado una oleada de hipótesis, desde creíbles y razonadas hasta imaginativas e increíbles. No en vano, Columbia Británica ha sido el centro de algunos de los crímenes más sanguinarios del país.

Entre las teorías que se manejan hay quien señala que los pies pueden haber pertenecido a víctimas del maremoto que mató a centenares de miles de personas en el Índico en diciembre del 2004.

Otros hablan de víctimas de grupos criminales que operan en la región. Una de las teorías más consideradas es que los restos pertenecen a los ocupantes de una avioneta que se estrelló en las aguas de la isla de Vancouver y cuyos cuerpos nunca fueron recuperados.