Lee Jezard - un ciudadano británico de 22 años de edad nacido en Redditch- ha sido condenado este jueves a pagar una multa de 375 euros después de haberse colado, el pasado julio, en un avión vacío de la compañía Lufthansa que se hallaba en el aeropuerto de Birmingham y haber mentido alegando que era el copiloto. Al menos, así lo afirman varios diarios locales como el «Daily Mirror».
El británico, concretamente, cometió la peligrosa travesura
(la cual ha sido calificada como «una de las mayores brechas de seguridad en un aeropuerto inglés» por las autoridades) el pasado 17 de julio. Aquella jornada, Jezard logró acceder al avión de pasajeros (en ese momento vacío) a través de la rampa para el equipaje. Totalmente borracho, no tardó en ser descubierto por el personal de limpieza del aeroplano, el cual le preguntó qué hacía en el aparato.
Desesperado por haber sido capturado, Jezard afirmó entonces que era el copiloto, aunque, pocos segundos después, corrigió su declaración después de que le pidieran su identificación personal. «Soy de la Marina». Ante la incredulidad de los presentes, no tuvo más remedio que admitir su trastada:
«Me estoy colando en lugares para ver si me pueden atrapar. Suelo acudir a cárceles y sitios similares». Minutos después, fue arrestado por varios agentes, a quien dijo que «estaba tratando de mostrar lo fácil que es subirse a un avión».
Jezard, que perdió su trabajo como gerente de hotel tras el incidente ocurrido hace un mes,
se ha declarado culpable además de haber robado comida en la cafetería del aeropuerto por valor de unos 45 euros. Todo ello le ha valido una multa total de 300 libras (375 euros).
Comentario: ¡Hasta los animales se dan cuenta de que podrían gobernar mejor que los políticos!