El último estudio de la Oficina del Censo estadounidense muestra que en 2010 la población hispana en el país alcanzó los 50,5 millones (un 16%) y en su mayoría son gente joven. En algunos estados, como Texas, más del 50% de los estudiantes son latinos. Sin embargo, los especialistas creen que aunque la población hispana tiene cada vez una mayor presencia en la sociedad norteamericana, las leyes anti inmigrantes frenan el proceso de su aprendizaje.

El informe divulgado por el Censo describe la composición demográfica de EE. UU. y traza tendencias en las próximas décadas que pueden tener repercusiones en la economía, los programas sociales de salud y educación y en las elecciones.

Según algunos expertos, si no fuera por los hispanos, varios estados habrían perdido población. Actualmente uno de cada seis estadounidenses es latino y estos índices son superiores en las partes del sur del país.

Los estudiantes de origen hispano ya son mayoría en los colegios públicos de Texas. Los conteos de la Agencia de Educación de este Estado revelan que en algunas áreas el porcentaje de esos alumnos alcanza el 90%. No obstante, los estudiantes latinos se encuentran con ciertos obstáculos en el proceso de su educación.

Cualquier niño puede cursar estudios en las escuelas públicas de forma gratuita hasta los 18 años de edad sin importar su estatus legal, sea documentado o indocumentado, explica el periodista Héctor Manuel Castro.

Formalmente, los hijos de inmigrantes pueden llegar hasta muy lejos si reciben la educación adecuada. Pero a menudo son "objeto de violencia por factores de odio racial", afirma Castro. Además, las leyes anti inmigrantes "están coartando la posibilidad de que estos muchachos sigan estudiando".

Por ahora, los demógrafos no precisaron si el crecimiento de la minoría hispana es debido a las altas tasas de natalidad o a la inmigración reciente, tanto legal como ilegal. En todo caso está claro que este tema irá ganando importancia para EE. UU. ya que estos estudiantes latinos formarán parte del futuro del país y su educación e integración en la sociedad norteamericana podrían ser fundamentales en los próximos años.