(España) -
El volcán situado en la dorsal noreste de Tenerife emite diariamente 1.300 toneladas de dióxido de carbono (CO2), una emisión superior al rango de valores normales registrado hasta la fecha para este sistema volcánico, informó hoy el Cabildo de dicha isla.
© ABCVolcán Dorsal de Abeque (Tenerife)
Esta cifra se ha detectado tras un estudio realizado por un equipo científico del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) y del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), ambas entidades dependientes del Cabildo de Tenerife, que en junio han evaluado las emanaciones difusas en el volcán de Tenerife Vieja.
Los resultados preliminares reflejan que la actual emisión difusa de CO2 a la atmósfera alcanza las 1.300 toneladas diarias, una emisión superior al valor promedio observado para este sistema volcánico hasta la fecha, aproximadamente 400 toneladas diarias, y ligeramente superior al valor máximo del rango de valores que pueden considerarse normales para el volcán dorsal noreste durante un periodo de fase inter-eruptiva o tranquilidad, que oscila entre las 140 y las 1.100 toneladas diarias.
Las emanaciones difusas de CO2 son silenciosas y dispersas, no son perceptibles a las personas dado que son muy débiles, se diluyen rápidamente en el aire y no son visibles al ojo humano y por lo tanto, recuerda el Cabildo de Tenerife en un comunicado, no representan un peligro para las personas.
Recuerda que las emanaciones difusas ligeramente anómalas y relativamente superiores a las 1.100 toneladas diarias en la dorsal noreste de Tenerife se han registrado puntualmente en 2007 y durante las últimas cuatro campañas científicas realizadas desde 2013 por el equipo Involcan/ITER, que lleva 17 años monitorizando este importante parámetro geoquímico para la vigilancia volcánica.
La planificación y ejecución de esta campaña científica ha sido posible gracias al proyecto de "Monitorización e investigación sobre la actividad volcánica de Tenerife" que financia el programa Tenerife Innova que coordina el área Tenerife 2030 del Cabildo.
La monitorización de este parámetro geoquímico es de una gran utilidad para el fortalecimiento del sistema de alerta temprana ante posibles erupciones volcánicas y crisis sismo-volcánicas como se ha podido comprobar en otros sistemas volcánicos que han experimentado episodios de reactivación volcánica.
Además el interés y la importancia de estos trabajos sobre emisión difusa de CO2 a través de toda la superficie del sistema volcánico para la vigilancia volcánica se debe a que la información generada por este tipo de campañas científicas no se puede obtener a través de redes instrumentales permanentes.
En esta campaña geoquímica de la dorsal noreste de Tenerife han participado dos estudiantes universitarios procedentes de las universidades de Stony Brook y St. Lawrence, ambas en el estado de Nueva York de Estados Unidos, a través del programa de prácticas que promueve la empresa británica GeoTenerife en colaboración con el Involcan.
Para la materialización de esta campaña se han realizado centenares de medidas in-situ de flujo difuso de CO2 y de sulfuro de hidrógeno (H2S), y se han recogido más de 1.900 muestras de gases en la atmósfera del suelo para su posterior análisis químico e isotópico.
Estas medidas y toma de muestras de gases se han realizado en aproximadamente 650 puntos de observación distribuidos a lo largo y ancho de los 210 kilómetros cuadrados investigados del volcán dorsal noreste de Tenerife según criterios volcano-estructurales y de accesibilidad.
Comentario: Este es un descubrimiento interesante, ya que nos muestra que el CO2 está siendo liberado debido a otros factores y no debido al hipotético calentamiento global provocado por el hombre.
Otro factor importante es que las temperaturas de los océanos están aumentando precisamente en lugares donde hay depósitos de metano y CO2 o volcanes submarinos. Si consideramos la cantidad abrumadora de volcanes activos en la superficie terrestre, podríamos imaginar que los volcanes submarinos también están bastante activos, lo que podría llevarnos a considerar que el calentamiento del fondo marino podría deberse a este tipo de actividad. Y cabe mencionar también el
comportamiento extraño de ciertas criaturas marinas que parecen estar huyendo de algo que está ocurriendo en su hábitat.
Es evidente este aumento de los niveles de CO2, tanto en los océanos como en la atmósfera, pero más alarmante es el aumento del gas metano:
El metano es un gas de efecto invernadero aún más potente que el CO2 y ambos se almacenan en grandes depósitos en forma de clatratos por debajo de los fondos oceánicos, en especial en los polos. Estos depósitos se están rompiendo por el aumento de la actividad volcánica (y la actividad sísmica que la acompaña), y luego se disuelven en las profundidades del océano, y en la actualidad se están desgasificando a niveles que tienen a los observadores seriamente preocupados porque saben, a partir del registro geológico, que esto sucede durante un cambio climático real, el cual, como una fase de transición, se acumula hasta un cambio abrupto e invariablemente catastrófico:
La crisis del Cambio Climático se intensifica: "Los niveles de metano están por las nubes"
El metano, un potente gas de efecto invernadero que puede conducir a un cambio climático rápido y descontrolado, ha sido referido como "el canario en la mina de carbón" y se ha teorizado que su emisión ha causado extinciones masivas del pasado, conocida como la "hipótesis del fusil de clatratos."
Muchos científicos creen que una liberación repentina de los clatratos de metano de los fondos marinos y el permafrost en el pasado condujo a un aumento repentino de la temperatura del planeta, también conocido como "cambio climático abrupto." La liberación de grandes cantidades de metano puede provocar un proceso fuera de control que es irreversible, al igual que "el disparo de un arma de fuego." El cambio climático abrupto puede causar que las temperaturas globales cambien en cuestión de años.
Podemos descontar la parte sobre "temperaturas fuera de control", porque mientras que las capas profundas de los océanos pueden estar calentándose, las capas superiores no, y tampoco la atmósfera, y... ¡Noticia de último momento! ¡son las capas superiores de los océanos las que transportan calor a las masas de tierra! Si las capas superiores se están enfriando, ¿qué efecto podemos pensar que podría tener sobre el clima, en el hemisferio norte, por ejemplo? ¿Nadie se ha dado cuenta de los severos inviernos de América del Norte, el norte de Europa y Asia en los últimos años? Además, los datos del núcleo de hielo nos dicen que los picos de metano son las firmas que marcan los límites entre los períodos glaciales e interglaciales.
(Erupciones volcánicas, aumento del CO2, océanos hirviendo y por qué el calentamiento global causado por el hombre ni siquiera es incorrecto)
Recomendamos leer los siguientes artículos relacionados para comprender mejor que los cambios planetarios de los que somos testigos actualmente, son más complejos que el simple calentamiento global antropogénico. Recuerden, el conocimiento protege.
Comentario: Este es un descubrimiento interesante, ya que nos muestra que el CO2 está siendo liberado debido a otros factores y no debido al hipotético calentamiento global provocado por el hombre.
Otro factor importante es que las temperaturas de los océanos están aumentando precisamente en lugares donde hay depósitos de metano y CO2 o volcanes submarinos. Si consideramos la cantidad abrumadora de volcanes activos en la superficie terrestre, podríamos imaginar que los volcanes submarinos también están bastante activos, lo que podría llevarnos a considerar que el calentamiento del fondo marino podría deberse a este tipo de actividad. Y cabe mencionar también el comportamiento extraño de ciertas criaturas marinas que parecen estar huyendo de algo que está ocurriendo en su hábitat.
Es evidente este aumento de los niveles de CO2, tanto en los océanos como en la atmósfera, pero más alarmante es el aumento del gas metano: Recomendamos leer los siguientes artículos relacionados para comprender mejor que los cambios planetarios de los que somos testigos actualmente, son más complejos que el simple calentamiento global antropogénico. Recuerden, el conocimiento protege.