El ácido fólico, también llamado ácido pteroilmonoglutámico, vitamina B9 o folacina, es una vitamina que junto con la vitamina B12 participa en la síntesis del ADN.

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Previene la aparición de úlceras bucales y favorece el buen estado del cutis. También retarda la aparición de las canas, ayuda a aumentar la leche materna, protege contra los parásitos intestinales y la intoxicación de comidas en mal estado.

¿Por qué debo tomar ácido fólico?

Se sabe que un suplemento de ácido fólico preconcepcional previene en un 50% la aparición de enfermedades del tubo neural como la anencefalia, espina bífida y mielomeningocele. Estas enfermedades son frecuentes, alrededor de 1 cada 1000 nacimientos, y algunas veces son causa de interrupción del embarazo en forma espontánea, y en países en los que el aborto es permitido, es motivo para una interrupción del embarazo.

Pueden evitarse si toda mujer que se embarazada recibe un suplemento de ácido fólico antes y durante el primer trimestre de la gestación, además de una dieta rica de esta vitamina.

El 95% de los niños que nacen con estas alteraciones pertenecen a familias sin antecedentes de esta enfermedad. El 50% de los casos podrían haberse prevenido si se hubiera recibido suplementos de ácido fólico en dosis de 1 miligramo diario por lo menos 2 meses antes de la concepción y durante el primer trimestre del embarazo.

¿El suplemento de ácido fólico puede provocar efectos adversos?

El suplemento de ácido fólico no provoca efectos adversos maternos ni fetales, y asociado con otras vitaminas no aumenta los beneficios. Tampoco está demostrado que un aumento de la ingesta de alimentos fortificados con ácido fólico prevenga con igual eficacia que los suplementos específicos de dicha vitamina. El ácido fólico también se utiliza como tratamiento de la anemia perniciosa, causada por el déficit de la vitamina B12.

¿Qué alimentos contienen ácido fólico?

El ácido fólico se encuentra presente en los vegetales de hoja verde oscuro, melón, damascos, calabazas, paltas, frutillas, naranjas, chauchas, brócoli, harina oscura de centeno, levadura de cerveza, germen de trigo, lentejas, endibias, hígado y yema de huevo entre otros.

¿Cuáles pueden ser los síntomas de su déficit?

En general los síntomas más frecuentes son la debilidad y el cansancio junto a un grado mayor de irritabilidad e insomnio. Pero también pueden aparecer alteraciones de carácter digestivo y aparición prematura de canas. La anemia también puede ser un signo de su déficit.

¿Cuál es la dosis recomendada?

La dosis recomendada varía de acuerdo a los antecedentes de enfermedades en la mujer o en sus parientes cercanos.

- Mujeres sin antecedentes de enfermedades del tubo neural

Como el 50% de los embarazos no son planeados, como prevención en mujeres en edad fértil se deben indicar suplementos diarios de ácido fólico de 0,4 miligramos, además de los alimentos que contengan dicha vitamina.

En el caso de buscar un embarazo se recomienda un suplemento de ácido fólico de 1 miligramo diario, 2 meses antes de quedar embarazada y durante los 3 meses posteriores a la concepción.

- Mujeres con antecedentes de embarazos con enfermedad del tubo neural

Deben recibir un suplemento de 4 miligramos diarios de ácido fólico durante el tiempo que planeen un embarazo, si fuera posible desde 2 meses antes al embarazo y continuarlo durante el primer trimestre de la gestación.

No debe asociarse con polivitamínicos, ya que pueden excederse las dosis recomendadas de otras vitaminas como la vitamina A, que puede ser teratogénica (que produce malformaciones en el feto).

- Otras mujeres con riesgo

Las mujeres con parientes cercanos de enfermedades del tubo neural, mujeres con diabetes (riesgo de enfermedad del 1%), o con convulsiones tratadas con carbamazepina (1%), o con parejas con defectos del tubo neural (2/3%), deben recibir un suplemento diario de 4 miligramos de ácido fólico desde por lo menos 2 meses antes del embarazo y durante 3 meses posteriores a la concepción. Estudios recientes demostraron que en estos casos disminuye el riesgo de enfermedad en un 71%.

Tomando estas simples precauciones, puedes evitar una serie de enfermedades que muchas veces son incapacitantes para tu bebé, y no traen ningún efecto perjudicial en tu salud ni en la de los hijos que traigas al mundo.