La ciudad de Toulouse, en el sur de Francia, se ha negado a cancelar una exposición de un provocador y afamado fotógrafo de moda de los 70 que, según los grupos feministas, glorifica la violencia contra las mujeres.
Los grupos feministas protestaron el miércoles ante el Museo del Cartel de Toulouse. Exigieron que se clausurara la exposición de las obras del fotógrafo de moda y comercial francés Guy Bourdin.
Las mujeres portaban pancartas con las palabras "no soy sólo una pierna" y "por favor, tengan más imaginación para nuestros sueños eróticos".
"El Ayuntamiento prefiere la cultura de la violación a las mujeres artistas", escribió en las redes sociales el Colectivo Midi-Pyrénées por los Derechos de la Mujer.
La filial Occitanie/Toulouse de la organización Movimiento HM por los derechos de la mujer se manifestó contra lo que, según ella, es "tolerar, justificar o excusar la violencia de género y sexual."
"Es inaceptable en todas partes y en todo momento", dijo el grupo.
Bourdin, fallecido en 1991, se hizo famoso en la década de los 70 por sus obras que mostraban imágenes estilizadas de mujeres en poses provocativas y otros temas arriesgados. Su fotografía fue descrita en los medios de comunicación y en los libros como "porno chic".
Sin embargo, el alcalde de Toulouse, Jean-Luc Moudenc, se ha negado a clausurar la exposición. "No aceptamos la 'cultura de la cancelación'. No tiramos los cuadros de David sobre las batallas napoleónicas ni los libros de Sócrates", escribió el responsable del Ayuntamiento en un correo electrónico a la radio France Bleu.
Comentario: Hay una gran diferencia entre los cuadros de David y estas piezas.
El comunicado citaba a Pierre Esplugas-Labatut, teniente de alcalde encargado de los museos, condenando la violencia contra las mujeres, pero diciendo que las fotos de Bourdin eran producto de su tiempo.
"Hemos elegido [confiar en] la libertad, la responsabilidad y el discernimiento de los visitantes. Cada uno es libre, con su propia sensibilidad, de apreciar o no apreciar la estética del artista y de interpretarla de forma positiva o negativa", ha dicho el Ayuntamiento.
El feminismo ha sido una de las fuerzas divisorias más poderosas desatadas sobre la humanidad. Está fundado en mentiras y se vale de falacias. Usa el arma letal del lenguaje para cumplir sus objetivos. Por ejemplo, re-definir todo. Si quieren afirmar que mirar a una mujer por más de tres segundos consecutivos equivale a una brutal violación, pues lo así lo promueven y las seguidoras con la mente bajo control luchan por ello. Ha sido a través de esta técnica que pueden calificar de «Glorificación a la violencia» la obra de Bourdin.
De veras, deberían buscar qué hacer.