Traducido por el equipo de SOTT.net

Subida del nivel del río Acre a lo largo de las fronteras del estado de Acre, en el noroeste de Brasil, y el departamento de Pando, en el norte de Bolivia.
Floods along the Acre River in Brasiléia,
© Marcos Vicentti/SecomInundaciones a lo largo del río Acre en Brasiléia, Estado de Acre, Brasil, finales de marzo de 2023.
as fuertes lluvias y el desbordamiento del río Acre inundaron amplias zonas de la ciudad de Río Branco, capital del estado de Acre en Brasil, el 23 de marzo de 2023. La ciudad registró 124,4 mm de lluvia en 24 horas hasta el 23 de marzo de 2023, según datos del Instituto Nacional de Meteorología (INMET) de Brasil. El río Acre en Rio Branco saltó de unos 8 metros a 15,80 metros en 24 horas. El nivel de inundación aquí es de 14 metros.

Calles y casas sufrieron daños en 10 barrios, entre ellos Placas, Calafate, Belo Jardim II, da Paz y Hélio Melo. Las autoridades ayudaron a evacuar a algunos residentes que se refugiaron en edificios escolares del barrio de Conquista.



Las inundaciones han continuado en la ciudad desde entonces, con una crecida del río Acre de 16,96 metros hasta el 28 de marzo. Hasta 2.213 personas han evacuado sus hogares.

El río también ha inundado zonas de los municipios de Assis Brasil, Brasileia y Xapuri. En Xapuri, el nivel del río Acre se situó en 15,16 metros (el nivel de inundación es de 15 metros) y en Brasileia el río alcanzó los 13,62 metros (el nivel de inundación es de 11,40 metros), a 28 de marzo.


En todo el estado, las inundaciones provocadas por el río Acre han afectado a casi 15.000 personas, muchas de las cuales han tenido que evacuar sus hogares. Hasta el 28 de marzo, las autoridades locales habían informado de 433 desplazados en Assis Brasil, 8.886 en Brasileia y 316 en Xapuri.

Las inundaciones a lo largo del río Acre también están afectando a zonas del departamento de Pando, en Bolivia, en particular al municipio de Cobija, situado a orillas del Acre, frente a la ciudad de Brasileia, en Brasil. El Ministerio de Salud de Bolivia informó de que al menos 300 familias han sido afectadas o evacuadas. Se han abierto cinco albergues para alojar a los desplazados.