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© La NaciónUna vaca es alimentada desde una lancha, en el lago Nahuel Huapi, donde las cenizas formaron una playa
Los expertos que envió la ONU confirmaron, después de semanas de trabajo, lo que los pobladores del norte patagónico más temían: las consecuencias de la erupción del volcán chileno Puyehue son catastróficas y costará años superarlas.

La presencia de cenizas alterará, no se sabe aún con qué magnitud, la flora, la fauna, el aire y el suelo en los 7,5 millones de hectáreas afectadas, y tendrá, durante mucho tiempo, un efecto pernicioso para los habitantes de la región.

El informe preliminar de los geólogos y vulcanólogos europeos señala a Villa La Angostura como la localidad más afectada por la erupción del volcán chileno , ocurrida el 4 de junio. La acecha un "riesgo geológico", sostuvieron, por la posibilidad de aludes de barro cuando se derrita la nieve que hoy cubre la ceniza, sumado al peligro de derrumbes y erosiones en las áreas pobladas con pendientes de más de 15 o 20 grados de inclinación, y a la eventualidad de inundaciones por el desborde de los ríos que atraviesan la ciudad, debido a la sedimentación de los 2,5 millones de m3 de cenizas acumulados.

En la región sur de Río Negro, los expertos prevén que el fenómeno de cenizas, sumado a la extrema sequía que se prolonga desde 2007, "continuará por años" con vientos predominantes del Oeste.

Un punto crítico es Ingeniero Jacobacci, en Río Negro. Los expertos de la ONU recomendaron allí que las actividades al aire libre se adapten a las tormentas de viento que levantan las cenizas durante horas y horas.

Reza el informe que los fuertes vientos "producen tormentas de cenizas que duran horas, incluídos desplazamientos", por lo cual se recomendó que "los horarios de las actividades deben ser adaptados para evitar estar al aire libre mientras perduren los vientos".

En Jacobacci periódicamente se suspenden las clases por los intensos vientos y la voladura de cenizas; los padres reclaman un sistema de transporte escolar para evitar que los niños resulten afectados al concurrir a las escuelas.

El último fin de semana, los efectos del viento volvieron a trasladar la pluma de cenizas a la llamada Línea Sur, Bariloche y Esquel, donde funciona el aeropuerto alternativo a esta ciudad cuyos vuelos el domingo fueron derivados a Neuquén.

Ayer apareció una luz de esperanza: llegó el avión verificador que testea los instrumentos de aeronavegación y los radares del aeropuerto, lo que renueva la expectativa de que las operaciones aéreas en esta ciudad sean habilitadas en los próximos días.

Recomendaciones

El equipo interdisciplinario de la ONU, compuesto por un geólogo suizo, un vulcanólogo italiano, un experto aéreo francés y un toxicólogo de los Países Bajos recomendó, en la fase preliminar, "institucionalizar un monitoreo binacional para Chile y Argentina por la actividad volcánica", y evaluó que la experiencia actual debe servir para futuros eventos.

Según el informe de diagnóstico y recomendaciones del que La Nacion obtuvo una copia, las cenizas no representan, en principio, ningún riesgo tóxico para la población, pero sugirieron los expertos un monitoreo sistemático y un análisis químico completo para analizar correctamente los posibles efectos para la salud. Recomendaron, además, la protección con antiparras y barbijos al remover las cenizas de techos, veredas y viviendas, debido a la "abrasiva irritación natural que producen".

La calidad del agua para consumo humano sufrió un aumento en los valores de aluminio en los testeos realizados en esta ciudad, mientras que en los lagos la presencia de cenizas y piedra pómez podría afectar la crianza de truchas y la fauna, que se alimenta del fondo de las aguas por la "gran cantidad de sedimentos que pueden interrumpir la cadena alimenticia".

La distribución de gran cantidad de cenizas en 7,5 millones de hectáreas de Neuquén, Río Negro y Chubut comenzó a ser despejada de las zonas urbanas donde se improvisaron canteras para su depósito. Los técnicos de la ONU las consideraron como sitios adecuados para alojarlas, pero "formando capas de alrededor de 30 cm y colocando materiales de mayor peso encima para prevenir la removilización de las cenizas". Sí objetaron que se depositen en los lagos debido a los altos riesgos ecológicos.

En actividad

El volcán Puyehue-cordón Caulle continúa en actividad con intensidad baja y tendencia estable, y un nivel de alerta volcánico "rojo: erupción menor", según reportó ayer el Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile (Sernageomin) que, además, detalló que descendió a dos eventos sísmicos de baja magnitud por hora, y que en los últimos días no se registraron episodios explosivos.

El Sernageomin destacó que las posibilidades de un evento explosivo aún permanecen debido a "posibles obstrucciones del conducto por la lava emitida o a cambios en la dinámica de la erupción, aunque es poco probable que alcance la magnitud de la primera fase eruptiva".

El paso internacional Cardenal Samoré, cercano al volcán, continúa cerrado desde el 4 de junio pasado y, desde hace un mes, las diferencias entre Chile y la Argentina respecto del paso de camiones, al que la población de Villa La Angostura se opone por el perjuicio que podría ocasionarles en las actuales circunstancias, impiden su reapertura. Esa situación podría paliar en algo el millonario impacto económico de la catástrofe geológica.

El fin de semana la alcaldesa de Puyehue, María Jimena Núñez, anunció en Chile la apertura al tránsito liviano a partir de mañana, aunque las delegaciones argentinas con base en la frontera no recibieron la notificación.

La Argentina dispuso ya la habilitación parcial del paso fronterizo con habilitación al tránsito liviano y minibuses, pero Chile rechazó esa alternativa y negó la habilitación del paso hasta que se permita el tránsito de todo tipo de vehículos, especialmente de camiones que trasladan mercaderías al extremo sur de Chile.

La polémica derivó en cartas documento y acciones judiciales de Bariloche y Villa La Angostura y, ahora, un nuevo trascendido de apertura que no fue notificado a las autoridades regionales de los organismos argentinos con competencia en el paso Samoré, según confió a La Nacion Diego Puente, delegado de Migraciones.