Un nuevo estudio desvela la magnitud de las necesidades europeas de tierras de otros países. Un estudio encargado por Amigos de la Tierra Europa al
Sustainable Europe Research Institute (SERI) pone de manifiesto los intercambios virtuales de tierras en el mundo, es decir los intercambios relacionados únicamente con las tierras dedicadas al cultivo de productos de exportación. Por otra parte, la hoja de ruta "Por una

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Europa eficiente en la utilización de los recursos" de la Comisión Europea viene a comprometer a Europa en la medición y mejor administración de su consumo global de tierras (1). El informe traza las huellas ecológicas (2) globales en las tierras, vinculadas a la importación de productos agrícolas y forestales, del conjunto de países de la Unión europea y de otros países como los EE.UU., Australia, India y Brasil.
Este estudio atestigua que el valor de esa huella es un buen indicador del grado de apropiación de recursos naturales. Pone en evidencia la magnitud del consumo europeo en la materia, como también su dependencia de otros países del mundo. Esta investigación nos demuestra que:
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Europa es el continente más dependiente de la "importación" de tierras. · Seis de los diez países que más tierras importan son europeos: Alemania, Reino Unido, Italia, Francia, los Países Bajos y España. Alemania y el Reino Unido importan más de 80 millones de hectáreas por año.
· El consumo promedio europeo en tierras es de 1,3 Has por persona y en países como China e India el consumo es de solo 0,4 Has por persona.
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Alrededor de un 69% de las tierras utilizadas para responder a la demanda europea de productos agrícolas y forestales se halla ubicado fuera del continente. · Se puede apostar a que la demanda europea ha crecido desde 2004, último año del que se disponen datos. Se puede apostar también a que seguirá aumentando, debido al crecimiento de la demanda europea de energías obtenidas de la biomasa y de los agrocombustibles.
1.- Introducción Europa importa anualmente masivas cantidades de productos alimenticios y otros productos procedentes del resto del mundo. Es posible cuantificar las cantidades importadas pero, ¿con qué extensión de tierras se corresponden? ¿Qué superficies se destinan a la producción de estos alimentos y productos? El presente informe es un resumen de los aspectos más destacados de este nuevo estudio destinado a medir las huellas dejadas por Europa sobre las tierras de los demás países del mundo, para responder a las necesidades de productos agrícolas y forestales. La noción de huella ecológica en las tierras que se utilizan representa la cantidad de tierras que un país destina a su consumo doméstico y de las que toma "prestadas" a otros países de los que importa productos alimenticios o ropa una vez hecha la deducción de las que destina a productos de exportación.