Estrella curará a Antonio de una enfermedad que le impide generar sangre en la médula ósea.
Estrella
© García corderoLos padres de Estrella muestran al bebé en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla.
Esta es la principal consecuencia del nacimiento de Estrella, el segundo bebé nacido tras una selección genética para salvar a su hermano Antonio, que sufre una enfermedad que le causa la eliminación de las células que generan sangre en la médula ósea y que se denomina aplasia severa.

Antonio padre, de 28 años, es cocinero en un hotel y vive con su esposa Melania, de 27 años, en Churriana de la Vega (Granada). Son una pareja joven y desde el sábado están "llenos de alegría" porque tienen a su niña y porque su niño "se va a salvar". Hace tres años que le diagnosticaron al pequeño Antonio la aplasia severa. El único tratamiento que existe para curarse es un trasplante de un familiar, genéticamente igual que él o de un perfil compatible, pero no existía. Hasta el sábado, que fue cuando nació el bebé tras una selección genética en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla.

El alumbramiento de Estrella, que ha pesado casi tres kilos y medios tiene los ojos y el pelo negro. Nada que ver con su hermano Antonio, rubio y con los ojos azules. Es el segundo nacimiento de estas características que se produce en España y también en el Virgen Rocío. Ha estado asistido por el equipo de la Unidad de Gestión Clínica de Genética, Reproducción y Medicina Fetal que dirige Guillermo Antiñolo. "El embarazo ha sido normal y el parto por cesárea. Ahora estamos pendiente de que el trasplante se realice con éxito", ha explicado Antiñolo. Por el momento no hay ninguna fecha establecida para la operación.

Con la aprobación en 2006 de la Ley de Reproducción Humana Asistida, cuestionada por los obispos, Andalucía se convirtió en la primera comunidad en recoger el Diagnóstico Genético Preimplantatorio como un derecho incluido en la cartera de servicios de la sanidad pública.

Esta técnica se lleva a cabo en tratamientos de reproducción asistida y consiste en implantar a la madre, después de una selección genética, embriones compatibles con los de su otro hijo para que el futuro niño pueda aportar células madre con las que intentar curar la enfermedad del hermano mayor.

La Unidad de Genética, Reproducción y Medicina Fetal del Virgen del Rocío logró en 2008 que una pareja tuviera un hijo libre de la enfermedad hereditaria y con idéntico perfil de histocompatibilidad (HLA), con lo que era el donante idóneo para posibilitar su curación mediante el trasplante de cordón umbilical. Ese nacimiento fue el primero de niños seleccionados genéticamente en España para curar a su hermano. Hasta entonces, los tratamientos de reproducción asistida se habían realizado en el extranjero. "Este tratamiento es posible en un sistema sanitario con el nuestro, el hecho de que una familia humilde es la que ha tenido esta posibilidad en un sistema público, es un valor añadido, ya que estas operaciones son muy complejas técnicamente, y que una familia humilde tenga las mismas posibilidades que la familia de un banquero pone en valor nuestro sistema sanitario", apostilla la Consejera de Salud de Andalucía, María Jesús Montero.

Desde hace un año y medio Melania tuvo que dejar de trabajar para dedicarse a cuidar a Antonio, ya que todos los jueves tiene que ir al materno infantil del hospital Virgen de las Nieves (Granada) para que le pongan plaquetas, sangre... "Él lo sabe todo y está acostumbrado al tratamiento. Lo que peor lleva son los pinchazos", cuenta Antonio padre. De momento tienen el donante, ya solo falta que los médicos decidan cuando será el trasplante. "Llevamos dos años sufriendo muchísimo, ahora lo que tenemos es alegría y ganas de ver a nuestros hijos en el colegio llevando una vida normal", aclara Antonio lleno de felicidad.