En poder del infante, clamaban los soldados, se encontraba ni más ni menos que un honda para lanzar piedras. Un arma sumamente dañina en manos de un niño de esa edad.
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© Khaleel Reash/MaanImagesNiños palestinos de Kafr Qaddoum
El increíble incidente sucedió el Lunes 2 de Abril, a las 17:30, cuando cuatro soldados entraron repentinamente al hogar de Murad amenazando con arrestar a Mo'men. Dos soldados recorrieron en el hogar buscando al niño, mientras otros 2 custodiaban la entrada.

Los soldados insistieron en que el chico les entregara la honda pues, argumentaron, la usaba para apuntarles. Aún más, exigieron que se les entregara al niño.

Bashar Shtayeh, familiar de Murad se encontraba en el lugar: "Los soldados entraron y apuntaron sus armas a la familia completa, amenazando con quedarse en la casa si no les entragaba a Mo'men."

Murad, padre de Mo'men indicó: "Mo'men no tenía una honda en sus manos. Y aún si la hubiese tenido, ¿qué importa?, es un niño".

Una discusión de media hora se llevó a cabo entre Murad, otros residentes del pueblo y los soldados. Finalmente los soldados dejaron el lugar. El ejército 'más moral' del mundo y la cuarta potencia militar mundial, había intentado detener a un niño de 2 años.

Demás está decir que el chico quedó aterrorizado por la situación. Murad: "Él estaba muy asustado y afectado. Ahora está algo mejor".

En Kufr Qaddoum se llevan a cabo protestas semanales contra la construcción del asentamiento ilegal de Qedumim, en tierras que pertenecen al pueblo. La represión del ejército Israelí sucede a diario. La historia de Mo'men es una más de ellas.

"Esto no nos amedrentará, seguiremos protestando" declaró Murad.