La iniciativa pretende sumar adhesiones de profesionales sanitarios a la objeción de conciencia contra la exclusión sanitaria de indocumentados.


"Juro que dejaré en un segundo plano mi ética y mi moral en época de crisis financiera". Es una de las frases con las que comienza una campaña promovida por una ONG, que denuncia una medida que el Gobierno español adoptará en septiembre por la que los inmigrantes en situación irregular no recibirán asistencia sanitaria.

La campaña publicitaria, que lanzó este miércoles la ONG Médicos del Mundo, ya ha recibido miles de visitas en Internet. Y es que muchos empleados del sector sanitario critican el nuevo decreto, impulsado por el Ministerio de Sanidad, que dejará a las personas que no cuenten con permiso de residencia sin acceso al sistema de salud público a partir del 1 de septiembre. Esta medida, consideran, va en contra de la ética profesional.

Con esta campaña, llamada 'Derecho a curar', la organización pretende no solo que profesionales sanitarios se sumen a la objeción de conciencia contra la exclusión sanitaria de los inmigrantes 'sin papeles', sino también sensibilizar a la población de las consecuencias que dicha iniciativa podría tener.

En el vídeo aparecen varios profesionales sanitarios prestando juramento con la mano izquierda en alto. Solamente al final del mismo se aprecia que los dedos de la mano derecha están cruzados, como se supone que se hace cuando se está emitiendo un falso juramento. La última persona en hablar declara que no cumplirán jamás todo lo que dijeron antes.

"La reforma sanitaria pretende que dejemos sin atención sanitaria a las personas sin papeles. Pero la salud es un derecho universal. Por eso hemos jurado atender sin discriminar y lo vamos a seguir haciendo, porque curar no es solo nuestra obligación, sino también nuestro derecho", dice a continuación una voz en off.

"Se trata de suscitar un movimiento del mundo sanitario contra una medida que choca contra la ética profesional", subrayó el presidente de Médicos del Mundo, Álvaro González.

"Queremos servir de vehículo de transmisión para que el personal sanitario reivindique, ejerza su derecho a la resistencia y su derecho a curar a toda persona que lo requiera, independientemente de su situación administrativa", agregó.

De este modo la organización espera contribuir a la iniciativa lanzada por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFYC) el pasado mes de julio, que suma ya más de 1.300 profesionales objetores contra la exclusión sanitaria.