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El Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) de Panamá decretó una alerta roja por las prolongadas y fuertes lluvias que han afectado a varios sectores del país, con un saldo de al menos tres muertos.

La entidad decretó el desalojo obligatorio de unas mil 500 personas de unas 18 comunidades ubicadas aguas abajo de la hidroeléctrica Bayano, 100 kilómetros al oeste de la capital, debido a que su capacidad de almacenaje fue sobrepasada.

Desde el martes pasado, la empresa de energía AES inició la apertura gradual de compuertas de Bayano -cuyo capacidad máxima es de 62.20 metros sobre el nivel del mar- con el fin de aliviar la carga de agua, cuyo vertedero desemboca en el océano Pacífico.

Informes de AES citados por el Sinaproc señalaron que en la noche del martes los niveles de la represa llegaron a los 63 metros, por lo que se decidió el miércoles continuar con el vertido de agua y emitir la alerta roja para la zona este de la provincia de Panamá.

Imágenes de la televisión mostraron casas anegadas de agua hasta el techo en varias comunidades del distrito de Chepo, en el oeste de la provincia de Panamá.

Unas 400 personas se refugiaron en escuelas y una iglesia de Chepo, mientras se continuaba con el desalojo de varias comunidades, ante el temor de que más comunidades resulten afectadas por las inundaciones causadas por el vertido de agua.

En las últimas horas fueron recuperados los cadáveres de dos niñas, quienes con su madre -aún desaparecida- viajaban en una lancha, pero zozobraron al intentar cruzar un río.

Mientras que en la ciudad de Colón, un joven de 23 años falleció en un hospital por las heridas sufridas a causa del deslizamiento de tierras sobre su vivienda en aquella población del Caribe, 80 kilómetros al norte de la capital.

Informes de meteorología de la Empresa de Transmisión Eléctrica (ETESA) indicaron que las lluvias continuarán por las próximas 24 horas, tanto en la vertiente del Pacífico como del Caribe.

Las intensas lluvias llevaron a la Autoridad del Canal de Panamá a suspender el tránsito de barcos por la vía -por donde pasa el 5.0 por ciento del comercio mundial- debido al crecimiento de los lagos Gatún y Alhajuela.

"Estamos tomando las medidas para normalizar la operación de tránsito en las próximas horas", dijo el vicepresidente ejecutivo de Operaciones de la ACP, Manuel Benítez.

Explicó que la medida fue adoptada porque el tránsito por el Canal podría ser afectado por las corrientes del río Chagres -tributario del lago Gatún-, en el sector de Gamboa, cuyo caudal aumentó por vertidos del lago Alhajuela.