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© RIA Novosti/Alexandr VilfGrito de la desesperanza
Una psicosis generalizada motivada por centenas de vuelos cancelados y retrasados se inició en los aeropuertos moscovitas Sheremétievo y Domodédovo. A los pasajeros los 'apaciguan' pelotones especiales de la policía antidisturbios.

Miles de pasajeros con tarjetas de embarque en la mano no han conseguido abandonar estos dos principales aeropuertos de Moscú en los últimos tres días. La causa principal del retraso de los vuelos son las condiciones climáticas, las consecuencias de la lluvia de hielo que afectó a las regiones centrales de Rusia hace dos días. Sin embargo, la fiscalía rusa inició una inspección sobre la actuación o cierta inacción de los dirigentes de cada uno de los nudos de transporte aéreo.

La situación de los pasajeros se vio agravada por la imposibilidad de volver a casa o a hoteles dado que los vuelos no estaban suspendidos, sino aplazados dos o tres horas, a las que luego se iban sumando tres horas más, y luego otras tres... A los afectados por el colapso aéreo les entregaron talones para un desayuno gratuito que tan solo suponía un vaso de bebida caliente y una cholcolatina, al tiempo que las cafeterías aumentaban el precio de un sándwich hasta 30 dólares. Esta situación duró horas y horas, mientras la afluencia de gente aumentaba constantemente.

Devolver los billetes y recuperar el dinero - lo que los portavoces de las compañías aéreas garantizaron a las autoridades rusas de transporte - resulta problemático. En las oficinas de los aeropuertos no hay dinero en efectivo, según atestiguan los pasajeros.

Todas estas circunstancias provocaron en la muchedumbre de pasajeros frustrados algo similar a una huelga de brazos cruzados unida a una cacerolada. Conforme a la peculiaridad de la situación, se cruzaban las piernas y en vez de las cacerolas se usaban los contenedores azules para el control de ropa en los escáneres de seguridad. Sus pedazos llenaron el suelo de los aeropuertos el tercer día del colapso.

Recientemente la administración de Sheremétievo ha informado de la suspensión de todas las salidas del 28 de diciembre lo que tiene el objetivo de descargar los terminales llenos de pasajeros cuyos vuelos están retrasados desde la tarde del domingo pasado. Fueron los pasajeros los que impulsaron esa decisión, ya que habían desencadenado un conflicto entre sí: unos impedían a otros pasar a los controles y a los autobuses, insistiendo en que les embarcaran primero, de acuerdo con la sucesión en la tabla.

La policía de seguridad de transporte fracasó en sus intentos de disolver las aglomeraciones de pasajeros de los vuelos anteriores que impedían el paso a los pasajeros de los vuelos abiertos para el embarque. En Domodédovo esa misión fue encargada a la policía especial antidisturbios, cuya simple presencia apaciguó a los protestantes.