Bucarest.- No hubo nada misterioso en la muerte de una bandada de aves en Rumania la semana pasada: simplemente estaban borrachos, dijeron los veterinarios.

Los residentes de la ciudad del mar Negro de Constanta alertaron a las autoridades el sábado luego de hallar decenas de estorninos muertos, temiendo que pudieran estar infectados con la gripe aviaria, que provocó masivas muertes en poblaciones de aves entre el 2004 y el 2006, señaló Reuters.

"Los exámenes a cinco pájaros mostraron mollejas llenas de orujos de uvas que causaron su muerte", dijo Romeu Lazar, jefe de la autoridad veterinaria de la ciudad, a Reuters, refiriéndose a un residuo con pulpa que es un subproducto de la fabricación de vinos.

Las aves no están acostumbradas al alcohol pero el duro invierno y la nieve habían dificultado que los pájaros encontraran alimento.

"Si hubiesen podido comer algunas semillas, esto habría diluido el veneno", señaló.

Se creía que los orujos de uvas procedían de una bodega de vinos, pero el veterinario jefe dijo que no sabía dónde podría haber ocurrido.

Han habido una serie de muertes de aves en masa sin explicación en varios países en todo el mundo en las últimas semanas, incluyendo Estados Unidos y Suecia.

Cientos de pájaros muertos fueron descubiertos en Louisiana este mes y 5.000 en Arkansas en Año Nuevo. Autoridades suecas también han estado investigando la muerte de 100 grajillas halladas en una calle en Falkoping.

Los expertos dicen que tormentas, granizo, relámpagos o cables eléctricos están entre las causas posibles de las muertes de las aves.