Al menos 17 pacientes ébola huyeron en la noche del sábado de la cuarentena a la que estaban sometidos en un hospital en un barrio pobre de la capital liberiana de Monrovia, informó hoy el diario "Front Page Africa".
Imagen
© CARL DE SOUZA AFP Una enfermera toma la temperatura a una niña con síntomas de padecer ébola.
"Rompieron las puertas y saquearon el lugar. Los enfermos huyeron todos", ha contado Rebecca Wesseh, testigo del incidente. Según Wesseh, los asaltantes gritaban consignas contra la presidenta del país, Ellen Johnson Sirleaf y aseguraban que "no hay ébola" en el país.

Según el secretario general de los trabajadores de la salud en Liberia, George Williams, al menos 29 pacientes con ébola o síntomas de padecerlo estaban ingresados en el hospital. "Deesos 29 enfermos, 17 huyeron. Nueve habían muerto hace cuatro días y otros tres fueron sacados a la fuerza del centro por sus padres", ha precisado Williams.

En el barrio pobre de West Point, en el que ocurrió e incidente, viven unas 75.000 personas y se encuentra muy cerca del centro de la capital de Liberia. Se teme que los enfermos puedan ahora contagiar a más gente.

El Ministerio de Sanidad había informado anteriormente su intención de poner en cuarentena todo el barrio para evitar que los habitantes viajaran a otras zonas. "Llevaremos alimentos y otros bienes a West Point antes de que las medidas entren en vigor". Pero muchos ciudadanos reaccionaron airados al anuncio.

Liberia, en el oeste de África, es uno de los países más afectados por la epidemia. Más de 400 personas murieron en el país a causa del virus, según datos de la Organización Mundial de la Salud. Entre ellos, el sacerdote Miguel Pajares.