Desde la declaración de Jerusalén como capital de Israel por parte de Donald Trump, el 6 de diciembre pasado, Palestina ha sido testigo de un considerable movimiento de protesta. Como es de costumbre, el ejército más psicopático del mundo ha dejado ver su verdadera naturaleza, y las historias que empiezan a surgir se vuelven cada vez más descabelladas.
Palestine palestina
© AMN
El mundo se estaba preocupado por las declaraciones de varias naciones árabes sobre una nueva Intifada, pero los resultados de la declaración de Trump han sido mucho peores, como de costumbre, para los palestinos más jóvenes. La población que vive en Cisjordania y en Gaza no goza de seguridad, acceso a la salud, servicios básicos, agua potable, trabajos, libertad de movilidad, certeza de que su hogar no será robado por Israel, y como si esto fuera poco, tampoco goza de la capacidad de pronunciar su descontento cuando un extranjero a miles de kilómetros de distancia hace una declaración unilateral que les afecta directamente.

Aunque existen voces disidentes dentro de Israel, el alarmante comportamiento del ejército israelí parece casi imposible de detener. Como última muestra de lo preocupante que es la situación en Palestina, AMN reporta que este viernes 29 de diciembre,
Dallas Loha palestine
© Robert Inlakesh | AMN
Dalal Loha, una niña parapléjica de 9 años, quien se encontraba en una ambulancia camino a un hospital para recibir atención de urgencias, falleció en dicho vehículo de emergencia luego que el ejército israelí decidiera no permitirle salir de un control de carreteras.

Como segunda víctima de las acciones israelíes del viernes, esta mañana, según reporta el sitio, Jamai Mosiah, de 21 años, falleció en el hospital luego de ser atendido por heridas de bala. Éstas fueron disparadas por un francotirador israelí mientras que Jamai participaba en las protestas en contra de la declaración de Donald Trump en Gaza.

Así que allí lo tienen, es triste reportar lo trágica que es esta situación, una vez más. Lo que el comportamiento del ejército israelí deja completamente claro es que, sin importar lo que se nos dice, el mismo se encuentra lo más lejos posible de ser un ejército moral.

Aunque la declaración de Donald Trump hiere los intereses árabes en Palestina, las acciones de Israel siempre están envueltas en su identidad de víctima. Israel espera que los eventos como los del viernes sean entendidos como actos de defensa propia, en los que la brutalidad y la frialdad con la que opera este régimen son completamente justificables bajo su estatus autogenerado de víctima perpetua.

Para Israel, el infinito potencial de vida de la pequeña Dalal carece de valor. Al carecer completamente de empatía, Israel se comporta hoy como lo haría un asesino en serie, buscando constantemente cumplir su enfermo cometido arrancándole la vida a alguien más.