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El aeropuerto de St. Louis en Estados Unidos reabrió para la llegada de algunos vuelos en la noche del sábado, luego de ser azotado por un tornado que también dañó casas y vehículos, cortando la electricidad de la ciudad del Oeste Medio de Estados Unidos. Las autoridades cerraron el Aeropuerto Internacional Lambert-St. Louis después de que el tornado devastó la zona en la noche del viernes, destruyó las ventanas de la terminal y realizó agujeros en el tejado, repartió escombros y dañó al menos un avión.

Las aerolíneas afectadas por el cierre incluyeron a Delta Air Lines, Southwest Airlines y American Airlines de AMR Corp. Al menos mil trabajadores fueron desplegados para ordenar las cosas. La energía fue restaurada a la terminal y los vuelos comenzaron a aterrizar en la noche del sábado, dijeron funcionarios.

Personal del aeropuerto dijo que oficialmente reabriría el domingo, cuando se espera que la salida de vuelos se reanude y cerca de un 70 por ciento de las instalaciones esté funcionando."No va a ser una terminal muy bonita, pero será una terminal funcional", dijo el portavoz del aeropuerto Jeff Lea.

El gobernador de Misuri, Jay Nixon, declaró estado de emergencia y destinó fondos estatales para ayudar con la limpieza. "Es sorprendente que un tornado F-4 pueda pasar por una zona altamente poblada sin dejar muertos. La gente tuvo una alerta de 34 minutos y esa alerta salvó innumerables vidas", dijo a periodistas, refiriéndose a la categoría de intensidad del tornado.

Algunas subdivisiones de casas fueron destruidas por el tornado. Techos fueron arrancados, hubo árboles que cayeron sobre las casas, vehículos que terminaron volcados, camiones que fueron sacados de las carreteras y vidrios rotos. Al menos 750 casas sufrieron daños, y menos 100 fueron totalmente destruidas, dijo Nixon. Hubo heridos, pero no se reportaron muertos.

Nixon, quien recorrió la zona por aire, habló con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien prometió su total respaldo y ayuda en los esfuerzos de recuperación, según la oficina del gobernador. El aeropuerto, ubicado dentro de los límites de la ciudad de St. Louis, a unos 8 kilómetros al noroeste del centro, fue cerrado después del paso del tornado. Varias personas resultaron heridas por los vidrios que lanzó el viento cuando azotó a la terminal.

Funcionarios dijeron que hasta 47.000 quedaron sin electricidad después del paso de la tormenta.

Editado en Español por Ricardo Figueroa