Después de haber llegado tan lejos con su absurdo teatro de montar un ataque con armas químicas y culpar al Kremlin, el gobierno británico aparentemente ha decidido que... es mejor seguir adelante.
skripals five eyes
Otra obra maestra de las armas químicas, presentada por los Cinco Ojos, productores de éxitos como "Armas de destrucción masiva iraquíes", "Armas químicas sirias" y "Libia mata a su propio pueblo".
Gracias a que Victoria Skripal tuvo la oportunidad de grabar su conversación telefónica con su prima una vez que se comunicó con ella, ahora sabemos que a los Skripal les está yendo tan bien que esperan ser dados de alta del hospital pronto. También nos enteramos por la prima que escuchó que alguien estaba instruyendo a Yulia sobre lo que ella podía y no podía decir por teléfono. Cuando Victoria le dijo que solicitaría un visado para ir al Reino Unido y visitarla a ella y a su tío, Yulia anticipó, correctamente, que era poco probable que su solicitud fuera aceptada.

Además, los británicos continúan rechazando al personal de la embajada rusa en Londres el permiso para visitarla, como se les exige en virtud del derecho internacional.

Los británicos tienen ahora un grave problema entre manos: ¿qué hacer con los Skripal? Si los dejan regresar a Rusia, es casi seguro que divulgarán detalles embarazosos para el gobierno británico.

Hoy, el Sunday Times británico informó:
Ofrecen nuevas identidades a Sergei y Yulia Skripal con la ayuda de la CIA - La hija envenenada se niega a reunirse con los rusos.
El Times cita a fuentes del MI6 diciendo que han analizado la posibilidad de trasladar a los Skripal a otro lugar fuera del Reino Unido con la CIA, y que a los ciudadanos rusos se les va a "ofrecer nuevas identidades y una nueva vida en Estados Unidos", ostensiblemente para "protegerlos de nuevos intentos de asesinato". ¿Acaso se les "ofrecerá" esta opción, o se les manipulará y se les obligará efectivamente a aceptarla?

Si no a los EE.UU., entonces irán a uno de los otros países de los "cinco ojos" en la Anglosfera: Canadá, Australia o Nueva Zelanda:
"El lugar obvio para reasentarlos es en Estados Unidos, porque es menos probable que mueran allí y es más fácil protegerlos bajo una nueva identidad. Es preferible que sean reasentados en una de las naciones de los cinco ojos porque su caso tendría enormes implicaciones de seguridad."
En otras palabras, ellos quieren vigilarlos de cerca, para que los Skripal no intenten hablar con la prensa o, Dios no lo quiera, con el gobierno ruso. ¿Qué más pueden hacer sino aceptar? Están prácticamente en cautiverio, en deuda con la inteligencia militar británica.

Las fuentes del Times nos aseguran que los Skripal "pronto comenzarán a ayudar a los investigadores con sus investigaciones sobre el ataque del agente nervioso del 4 de marzo". Además, Yulia supuestamente "rechazó las solicitudes de la embajada rusa en Londres para que les proporcionaran a ella y a su padre apoyo consular", un movimiento que ellos caracterizan como una señal de que ella está dispuesta a "desertar".

Sólo tenemos la palabra de Gran Bretaña de que así es. Y la palabra de Gran Bretaña (sin ninguna evidencia que demuestre el paradero y el bienestar de los Skripal) no tiene ninguna credibilidad. "

En una aparente maniobra de propaganda para lanzar una cortina de humo sobre el hecho de que la semana pasada fue sorprendido mintiendo acerca de que el supuesto agente nervioso "novichok" era "definitivamente" de origen ruso, el Sunday Times también publicó hoy un artículo de opinión de este bufón de ministro de Asuntos Exteriores británico. Boris Johnson lanzó una demente diatriba contra Jeremy Corbyn, acusando al líder del Partido Laborista de ser "el idiota útil del Kremlin" por "actuar al servicio de Putin" al negarse a decir "inequívocamente, que el Estado ruso fue el responsable". Johnson también acusó al Kremlin de diseminar "una avalancha de mentiras y desinformación" sobre el ataque y dice que Corbyn está apoyando este "torrente de absurdos".

No leerá una mejor descripción de las acciones del gobierno británico en este extraño asunto.

Johnson acusó a Corbyn de traición:
"Sólo hay una cosa que ayuda al Kremlin y le da falsa credibilidad a su ataque propagandístico. Es cuando los políticos de los países afectados se adhieren a ellos. Tristemente, llego a la conclusión de que Jeremy Corbyn se ha sumado a este esfuerzo".
Al igual que en Estados Unidos, los medios de comunicación rusos tienen un alcance relativamente pequeño en el Reino Unido. La única "avalancha de propaganda" de la que hemos sido testigos durante este último mes ha venido de las armas de propaganda del Reino Unido, que son dominantes en todo el mundo.

Johnson luego se desvió hacia un psicoanálisis de Corbyn, teorizando que sus "antecedentes izquierdistas infantiles" lo habían llevado a simpatizar con "cualquier país, cualquier movimiento, por poco atractivo que resulte, que sea hostil a Gran Bretaña", antes de concluir que:
"Corbyn se avergüenza a sí mismo al prestarles ayuda. Realmente es el idiota útil del Kremlin".
Además del sabor vil y acusador de la diatriba de Johnson, me parece interesante su recurso a caracterizar a Corbyn como "infantil". Hay un fuerte elemento de proyección aquí, por supuesto, porque en realidad es Corbyn quien está siendo el adulto y Johnson el niño petulante. La afirmación de Johnson está tan claramente alejada de la verdad que podríamos incluso describirla como una proyección psicopática.

Pero esta contradicción de Johnson quizás habla de algo que está más ampliamente arraigado culturalmente en la sociedad británica. Durante mucho tiempo, la teoría política británica con respecto a su imperio y a las relaciones internacionales contenía en su núcleo la creencia de que los nativos a los que estaban saqueando y abusando eran "como niños" porque estaban "gobernados por sus pasiones", más que por la "racionalidad", como las élites británicas creían que era su caso. Se derramó mucha tinta argumentando el razonamiento de que los británicos (y los europeos occidentales en general) habían " superado las emociones ", que son, en su opinión, un retroceso evolutivo, una especie de residuo de las "sociedades primitivas".

Ahora sabemos, por supuesto, que lo cierto es lo contrario: el desarrollo psicológico saludable requiere desarrollar las emociones hasta la madurez, no amputarlas o eviscerarlas como si fueran un apéndice redundante. Además, se ha establecido que no existe tal cosa como la "racionalidad pura" porque todo el mundo está sujeto a impulsos subconscientes y emocionales. La creencia rígida de lo contrario puede, de hecho, fomentar la psicopatía y otras tendencias patológicamente autorreferenciales, como la creencia en la propia superioridad sobre los demás, y enmascarar el instinto depredador inconsciente que parece ser un sello distintivo de los políticos británicos de "trastienda" y de los "funcionarios públicos de alto nivel".

¿Dónde deja eso a la gente como Johnson? ¿Acaso ha "superado la refriega", su desarrollo se ha retrasado hasta el punto de no poder recuperarse o le falta algo esencialmente humano?

Por último, el Times también informó que el embajador de Rusia en el Reino Unido ha pedido una reunión con Johnson, lo que sus fuentes de inteligencia enmarcaron como si los rusos "trataran de enturbiar las aguas utilizando una táctica de distracción".

¡Malditos rusos con sus llamados abiertos a la transparencia y al debido proceso! ¿Qué clase de mente concibe tales tácticas antidemocráticas?

Suponiendo que Corbyn se convierta en primer ministro, ni siquiera puedo imaginarme por dónde comenzaría la monumental tarea de drenar el pantano británico.