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Hasta las 21 cayeron 30,2 milímetros de lluvia. Los mayores problemas se registraron en horas de la tarde, cuando el aguacero fue muy fuerte acompañado de granizo, lo que generó anegaciones de calles y avenidas.
Los 31 grados del miércoles descolocaron a más de uno. Semejante temperatura a fines de abril no es lo normal, por eso se preveía que una tormenta como la de ayer estaba al acecho. Y finalmente se desató, en una jornada que empezó mal, se puso peor y terminó con un clima muy parecido al que el otoño acostumbra a regalar.

Sin la gravedad de otras ocasiones pero con inconvenientes similares en diferentes zonas de la ciudad, la tormenta que se desató en horas de la tarde de ayer fue el tema más comentado por los santarroseños. Desde el amanecer se registraron ráfagas muy intensas de viento, que llegaron hasta los 59 kilómetros por hora a las 17:08, en un marco de nubes grises y amenazantes. Luego hubo un marcado descenso de la temperatura, algunas gotas y finalmente el aguacero y el granizo.

Según los datos aportados por el Servicio Meteorológico Nacional, la temperatura mínima fue de 10 grados a las 20:50 mientras que la máxima llegó a 16,9º a las 14:20, siempre con altos porcentajes de humedad, que hacia las 19 fue total, con un 100 por ciento.

La lluvia comenzó a caer a las 15:45, y poco antes de las 17 tomó su mayor intensidad junto a un granizo con piedras de poco tamaño pero que cubrieron de blanco calles, veredas y casas.En pocos minutos varias arterias y avenidas se vieron repletas de agua, como sucedió con las avenidas Ameguino, San Martín, Antártida Argentina, Alsina, Roca y calles tanto del centro como de distintos barrios de la ciudad.

Uno de los sectores más afectado fue el del barrio Almafuerte, donde el canal de desague hacia la laguna Don Tomás se tapó y provocó anegamientos. Según vecinos que se comunicaron con esta redacción, convocaron a los Bomberos para que trabajen en la zona.
El temor de los frentistas era que el agua sobre la calle Catamarca ingresara a sus hogares, pero la lluvia bajó su intensidad y el peligro se disipó.

Viento

En horas de la mañana, el viento que sacudió a la ciudad provocó la caída de un árbol sobre una casa, en la calle Allan Kardec al 1.700. El árbol rompió algunas tejas de la vivienda. Minutos antes del hecho, el dueño de casa había retirado su auto del lugar donde finalmente cayó la acacia, según comentó tras el incidente.

También en las primeras horas de la mañana la Dirección Nacional de Vialidad (DNV) lanzó un alerta a los conductores que debían transitar las rutas pampeanas porque la visibilidad era reducida por polvo en suspensión como consecuencia de fuertes vientos en la zona. En el comunicado de prensa se pidió a los conductores "circular con sumo cuidado, disminuir la velocidad, mantener las luces bajas encendidas y guardar una prudente distancia con el vehículo que los antecede".