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Un tornado dejó al menos un muerto y decenas de personas heridas en Auckland, la mayor ciudad de Nueva Zelanda, este martes, al arrancar el techo de un centro comercial suburbano, según el último balance oficial.

Este tornado, con vientos de 200 km/hora, llegó a las afueras de Albany sin advertencia alguna alrededor de las 15H00 (03H00 GMT), volcando automóviles y derribando árboles, mientras dejaba un rastro de destrucción a lo largo de varios kilómetros.

Las autoridades habían señalado inicialmente dos muertos, pero luego revisaron el balance, disminuyéndolo a solo un muerto.

El alcalde de Auckland, Len Brown, manifestó su asombro por que no hubiera más decesos, teniendo en cuenta que cientos de personas perdieron la vida en los recientes huracanes que se produjeron en Estados Unidos. "Fue un tornado enorme, brutal, (...) tenemos una suerte extraordinaria de que no se hayan perdido más vidas", declaró Brown a TV3.

Este huracán es el último en una serie de desastres que afectaron Nueva Zelanda, incluyendo dos sismos en Christchurch, el segundo de los cuales dejó más de 180 muertos, y una explosión en una mina de carbón en noviembre pasado en la cual murieron 29 mineros.