Una mujer fue atacada letalmente por un tiburón blanco en la costa del estado de Maine, noreste de Estados Unidos, cuando nadaba junto a su hija. El hecho ocurrió en pleno verano boreal, temporada en la que crece el número de focas en la costa y, con esto, el de tiburones al acecho. Los especialistas alertan sobre los peligros ante el suceso.
Shark
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Julie Dimperio Holowach falleció el 27 de julio tras ser atacada por un tiburón blanco en la costa de Maine, noreste estadounidense. Su hija, que nadaba con ella cuando ocurrió el hecho, llegó ilesa a la costa y fue quien gritó por ayuda.

Según relató al Boston Globe el testigo Tom Whyte, mientras observaba la costa pudo ver a dos mujeres, madre e hija, nadando desde lejos cuando, de repente, una de ellas cae hacia atrás, se hunde en el agua, y agita las manos hacia arriba.

La otra, en tanto, nota el hecho y atina a nadar hacia la orilla. Al llegar, recobra el aliento y pide auxilio. Allí, junto a otros vecinos la atienden mientras llaman a los paramédicos. Cuando vuelven a ver, Dimperio yace flotando sobre el agua, aparentemente sin vida. Posteriormente, el equipo médico encuentra en el cuerpo de la víctima un fragmento de diente de tiburón blanco.

La mujer de 63 años es el primer caso letal de un ataque de tiburón en la historia de Maine y el tercero en la región de Nueva Inglaterra — región comprendida por los estados de Maine, Nuevo Hampshire, Vermont, Massachusetts, Rhode Island y Connecticut — .

"Creo que en general se acepta que el aumento en el número de focas está llevando a que más tiburones blancos se acerquen a la costa durante algunos meses", explicó el científico del Acuario de Nueva Inglaterra Nick Whitney, en la Radio Pública de Maine.

Del mismo modo lo explicó el experto en tiburones Greg Skomal, que dijo que la zona es "una parada de descanso en una carretera importante" en el recorrido de estos tiburones, ideal para conseguir focas, su fuente de alimento preferida.

Sin embargo, Patrick Keliher, comisionado del Departamento de Recursos Marinos de Maine, dijo en conferencia de prensa que no consideraba que el cierre de las playas fuera necesario "debido a la rareza del evento".