El fallecido recriminó una serie de gamberradas a uno de los jóvenes.
banda de adolescentes,mata a golpes hombre 39 años,provincia de Madrid,España
A Iván lo mataron a golpes. Machacándolo entre todos a puñetazos y pateándolo en el suelo hasta el final.

Iván Vaquero Sanz, vecino muy querido en Velilla de San Antonio, localidad en la que su familia es una de las más conocidas del pueblo, murió este domingo tras ser agredido salvajemente el pasado 13 de noviembre de 2020 por una banda de adolescentes.

Este grupo, también del pueblo, se dedica a extorsionar y a amenazar a los vecinos. Además, aseguran que lo peor de todo es que nadie está haciendo nada para remediarlo.

El hombre, de 39 años, fue ingresado en un hospital tras la brutal paliza, pero no pudo sobreponerse a las gravísimas lesiones sufridas.

La Guardia Civil de Rivas ha abierto una investigación para detener a los culpables, entre los que hay al parece varios menores de edad.

El trágico suceso se produjo el pasado viernes pasadas las 20:30 de la tarde en las inmediaciones del domicilio de la víctima, un hombre llamado Iván, muy conocido en el municipio.

Al parecer, el fallecido recriminó una serie de gamberradas a uno de los jóvenes, que a los pocos minutos regresó con el resto de la pandilla. Iván discutió con ellos y todos los integrantes del grupo comenzaron a golpearle de forma brutal. Los agresores, haciendo uso de una violencia atroz, no se conformaron con apalear a la víctima.

Le golpearon hasta que perdió el conocimiento y siguieron pateándole la cabeza cuando ya estaba desvanecido en el suelo. La víctima fue trasladada a un hospital la noche del viernes, pero ingresó con pronóstico muy grave, prácticamente en estado de muerte cerebral. Este domingo se certificaba su fallecimiento.

Nada más conocer la agresión, multitud de vecinos salieron a la calle de forma pacífica pidiendo justicia para Iván y denunciando que los agresores eran muy conocidos en el municipio por su historial de robos y violencia. Las concentraciones vecinales se repitieron este domingo con críticas al Ayuntamiento, al que acusan de no resolver los problemas de inseguridad que causan habitualmente los autores de la muerte en un pueblo que cuenta con 12.193 habitantes.

Los vecinos reclaman más seguridad ante esta pandilla de menores y no tan menores que los tiene atemorizados.