Traducido por el equipo de SOTT.net

El incendio en una explotación de Zeagold se declaró el lunes por la mañana y "se ha tardado buena parte del día en contenerlo", según un portavoz de la empresa.
eggs
Se teme que el incendio de Zeagold agrave la escasez de huevos provocada por la prohibición de la cría en batería.
Doce trabajadores que se encontraban en el lugar resultaron "ilesos, pero muy angustiados", dijo el portavoz. Se estaba trabajando para determinar cuántas gallinas habían muerto, pero Zeagold estimó que eran unas 75.000. La empresa revisó posteriormente esa cifra a la baja. La empresa revisó posteriormente esa cifra a 50.000.

El incendio puede tener repercusiones que vayan más allá de la muerte inmediata de las gallinas, ya que puede agravar la escasez nacional de huevos.

El portavoz de Zeagold dijo que aún era demasiado pronto para saber qué efecto tendría el incendio en toda la cadena de suministro: "Obviamente, habrá algún impacto: no es bueno que ocurra en plena escasez".

Nueva Zelanda sufre escasez de huevos desde principios de año, cuando puso fin a la cría en batería. La prohibición se venía gestando desde 2012 y el número de gallinas en batería se había reducido con el tiempo hasta representar solo el 10 % de la producción total de huevos, pero su prohibición definitiva a principios de enero ha bastado para sacudir la cadena de suministro de huevos, dejando vacías las estanterías de los supermercados, a los propietarios de tiendas controlando las compras de bandejas y a los amantes de los desayunos copiosos desamparados.


Comentario: La prohibición de las granjas en batería "lleva en proyecto desde 2012" y, casualmente, acaba de aprobarse el mes pasado...


La escasez ha llegado al punto de generar polémica: un supermercado de una pequeña ciudad prohibió a la tripulación de un crucero comprar más huevos después de que se agotaran las existencias; los periódicos han publicado columnas de consejos sobre cómo hornear sin huevo y preparar revueltos de tofu; y en enero, la SPCA publicó un aviso en el que pedía a los neozelandeses que no se lanzaran a la compra precipitada de aves de corral de traspatio, ante la preocupación de que un aumento de la tenencia de pollos por aficionados provocara que los animales no recibieran los cuidados adecuados.

Antes del incendio de Zeagolds, los granjeros habían calculado que necesitaban criar otras 300.000 gallinas antes de que remitiera la escasez.

El director ejecutivo de la Federación de Productores de Huevos, Michael Brooks, declaró a Stuff el lunes: "El suministro de huevos es escaso, así que esto no ayudará en nada".