Traducido por el equipo de SOTT.net
Divisive Societal Collectivism
"Pero debemos darnos cuenta de que incluso esta tendencia a restringir la explotación de los privilegios de clase es un ingrediente bastante común del totalitarismo. El totalitarismo no es simplemente amoral. Es la moral de la sociedad cerrada - del grupo, o de la tribu; no es egoísmo individual, sino que es egoísmo colectivo."

~ Karl Popper, The Open Society and Its Enemies - Volume One: The Spell of Plato (La sociedad abierta y sus enemigos - volumen uno: El hechizo de Platón)
El poder del Estado se basa exclusivamente en la destrucción del individuo, y en la participación, aceptación, aquiescencia y apoyo del Estado como dios, por parte de los miembros colectivos de la "sociedad", que han sucumbido a los esfuerzos del Estado por dividirlos en una multitud de grupos enfrentados entre sí. El objetivo de este antagonismo masivo intencionado es construir personalidades agresivas diferentes con el fin de preparar el escenario para la división y el caos desenfrenados. Esta metodología de distracción intencionada enfrenta a unos contra otros, siguiendo la vieja estrategia de divide y vencerás. Ha funcionado contra el pueblo y su libertad durante casi toda la historia, pero ha adquirido un nuevo significado en esta cultura inmoral, basada en el consumo, irresponsable, apática y posmoderna, consumida ahora por una fría existencia tecnológica.

Sin esta burda división de la sociedad, el individuo y los individuos en masa, reinarían supremos, y la clase dirigente y el gobierno se volverían políticamente impotentes considerando su interminable impulso hacia el poder y el control sobre un gran número de colectivos no pensantes. Esta revelación es evidente, por lo que la solución necesaria para disminuir o destruir a aquellos que buscan y practican la dominación autoritaria, parece obvia y también simple, pero debido a las debilidades y defectos del hombre, no es tan simple como parece.

La historia de toda política, gobierno y dominio, es una historia de autoridad desenfrenada, robo, perversión, crimen organizado, poder, control y asesinatos en masa. No es, y nunca ha sido, un esfuerzo para "servir" al pueblo, sino sólo para servir al Estado o a los deseos personales y empresariales. Aquellos que eligen la política, han elegido voluntariamente el camino de gobernar sobre otros, lo que en efecto, es una admisión de búsqueda de poder, opresión y dominación. Adherir al sistema de creencias políticas, aceptar voluntariamente una clase dominante mediante el fraude del voto, es poco más que renunciar intencionadamente a la libertad en favor del dominio tiránico y la servidumbre.

Consideremos la desquiciada naturaleza divisoria de esta población hoy en día. Es una de negros contra blancos, hombres contra mujeres, demócratas contra republicanos, religiosos contra seculares, "transgéneros" confundidos y trastornados contra todos, la realidad de la biología contra la estupidez, neomarxistas contra niños y todos los hombres blancos, tradición contra posmodernismo, y raza contra raza. En realidad es incluso mucho peor que esta idiotez; es todos contra todos en este entorno de odio, con el Estado (gobiernos y gobernantes) haciendo la guerra a toda la humanidad.

Esta no es la progresión natural de toda la humanidad tal y como yo la veo, aunque la especie humana sea defectuosa casi más allá de lo comprensible. Pienso esto porque la humanidad no siempre ha sido consumida por esta gran indiferencia, apatía, ignorancia y mentalidad de rebaño. La idea de lo correcto sobre lo incorrecto, (el bien sobre el mal) considerando a la mayoría de las poblaciones en general, era mucho más evidente en épocas pasadas, y esa actitud se tenía en mayor consideración en general. Pero en los tiempos modernos, el condicionamiento a largo plazo de las personas por medio de la propaganda, todo ello destinado a adoctrinar las mentes con el fin de crear una condición de ocultamiento de la verdad y de alejamiento de la compasión, ha alcanzado una masa crítica.

Las llamadas "civilizaciones" han librado una guerra brutal entre sí desde el principio, buscando más poder y control a cada paso, pero el alcance de esa agresión es ahora universal en la mayoría de los Estados y sus súbditos. Esto es ahora evidente en todo el mundo. ¿Se ha debido esto sólo a los esfuerzos de los gobiernos y las clases dominantes por controlarlo todo, o es culpa del propio pueblo? ¿Inició el Estado este complot, y acabó la gente cediendo al poder y aceptando que es normal? Obviamente, la culpa es de ambos.

La matanza de inocentes durante la mayor parte de nuestra existencia podría verse como el elemento fundador de nuestra caída, creando una falta de empatía hacia los demás, pero ¿qué causó tal agresión y asesinato entre una sola especie si no es el estado natural del hombre? En mi opinión, y como siempre, todo se reduce al mal contra el bien, pero ¿se basa esa determinación en la antigua creencia de "Dios" contra "Satanás", o se ha aceptado esta conclusión debido a una narrativa estructurada a propósito por quienes pretenden controlar a las masas colectivas? Si es así, ¿explicaría eso la progresión de la ceguera indiferente que parece universal hoy en día?

No podremos responder aquí a una pregunta tan polémica y filosóficamente complicada en su totalidad, por supuesto, pero uno tiene que preguntarse por qué tantos se han alejado de la lógica, la razón, la compasión, la cooperación y el sentido común, en favor de la falsa creencia de que todo bajo el sol tiene que ser aceptado como normal. La única manera de que esta completa locura se haya normalizado, es que la gente haya abandonado la idea del individuo y de la soberanía individual, y haya aceptado el colectivismo social, que sólo puede traer ignorancia y división masivas. El colectivismo es un cáncer de la mente, y sólo puede dar lugar a una existencia sin sentido.

Un ejemplo extremo de mentalidad colectiva absurda es el reciente falso "fenómeno" llamado "transgenerismo". Dependiendo de la encuesta concreta que se acepte, y aceptar cualquiera es cuestionable, se afirma que aproximadamente entre 1 millón y 1,5 millones de personas supuestamente se "identifican" como "transgénero" en EE.UU. Teniendo en cuenta que esta población es de 335 millones de personas, eso significa que alrededor del 0,4% se han "identificado" como "transgénero". Las cifras mundiales indicarían que entre el 0,1% y el 0,6% se identifican como transgénero". Por supuesto, esto es una gran minoría, incluso si estas cifras no son muy exageradas. Pero si un viajero espacial extraterrestre de otro planeta aterrizara de repente en Estados Unidos, pensaría inmediatamente que casi todos los humanos son transgénero, y que son biológicamente ignorantes. Las ondas de radio, todos los medios de comunicación importantes, la totalidad del gobierno, las empresas grandes e incluso más pequeñas, la mayoría de las instituciones, especialmente las escuelas públicas, y casi todos los anuncios comerciales, eventos deportivos, programas de televisión y películas, entre casi todos los demás lugares, están inundados de personajes "transgénero" y "transgenerismo" en general. Por supuesto, esto es absurdo.

Los niños están siendo bombardeados con mentiras, y están siendo el objetivo de instituciones gubernamentales y privadas, con el fin de forzar la noción atroz de que todos debieran respetar las identidades 'transgénero', y debieran aceptar que todos pueden estar confundidos acerca de su propio género. Los depravados programas "trans" destinados a confundir y adoctrinar a los niños están proliferando y son completamente inmorales, y lo más obvio aquí, y el elemento más revelador de este horrible engaño, es que la mayoría de los que se "identifican" como "transgénero" son niños pequeños y adultos jóvenes. Los mayores de 50 años que se sienten confundidos sólo representan el 0,3% del total. Esto no debería sorprender en absoluto, ya que los niños son el objetivo de esta campaña maligna sólo porque son inocentes y vulnerables a las mentiras, la propaganda y el adoctrinamiento.

Se trata de un esfuerzo masivo del Estado para corromper y destruir esta y las futuras generaciones de niños, de modo que los futuros adultos sean incapaces de funcionar como seres humanos normales. Esto conducirá a la despoblación, por supuesto, un objetivo deseado por los gobernantes globalistas, pero también conducirá a una futura población adulta completamente atontada y manipulada, haciéndola susceptible de control total. Usar y abusar de los niños para ganar poder sobre las generaciones futuras es deplorable y está más allá de cualquier maldad, pero ahora está siendo aceptado como normal por muchos en este país. ¿Cómo puede permitirse que una atrocidad como esta ocurra en cualquier país formado por personas decentes y morales? La respuesta a esta pregunta es que no puede ser permitido por ninguna sociedad moral, así que, ¿qué dice esto sobre el lamentable estado de la moralidad en lo que se conoce como "América"?

El colectivismo social en medio de esta atmósfera divisoria, fomentado o no por el Estado, y aceptado por el rebaño analfabeto; es el epítome de la estupidez ininteligible, y sólo puede conducir a la autodestrucción. La única solución viable para cambiar este rumbo que ha consumido a este país, es resucitar la importancia del individuo en la sociedad, restablecer la libertad eliminando todo poder del Estado, y abandonar cualquier idea de que una masa colectiva de seguidores que esperan que otro resuelva todos sus problemas por ellos, pueda tener éxito de alguna manera.

Esto requiere responsabilidad personal, y eso no puede lograrlo ningún grupo, ni ninguna solución simple elaborada por otro, puede liberarte de tu propia esclavitud. Cada individuo es responsable de su propia suerte en la vida, así que o te levantas y niegas toda tiranía, o comprendes que no tienes derecho a la libertad.
"La sumersión socialista del individuo bajo la prerrogativa del colectivo es una visión perversa y pútrida para la humanidad."

~ A.E. Samaan
Enlace de referencia:

Números transgénero

(Tenga en cuenta que la información sobre este tema es conjetural en el mejor de los casos, y probablemente muy exagerada, y exhibe un sesgo extremo a favor de la narrativa del Estado. Independientemente de ello, las cifras y las edades son reveladoras del complot para destruir a los niños.)
Gary D. Barnett [envíele un correo] es un profesional de las inversiones ya retirado que lleva dos décadas escribiendo sobre asuntos de libertad, política e historia. Está en contra de toda guerra y agresión, y en contra del Estado. Recientemente ha finalizado una colaboración con la ex congresista estadounidense Cynthia McKinney, y ha colaborado en su nuevo libro, ""When China Sneezes" From the Coronavirus Lockdown to the Global Political-Economic Crisis" (Cuando China Estornuda: Del Encierro por Coronavirus a la Crisis Político-Económica Mundial). Actualmente vive en Montana con su mujer y su hijo. Visite su sitio web.