En una noticia inesperada y un tanto extraña procedente de Israel, las autoridades gubernamentales afirman haber desarticulado una importante red de espionaje, deteniendo a siete ciudadanos israelíes por recopilar información en nombre de la inteligencia iraní, anunció el lunes la agencia de seguridad interna israelí Shin Bet.
© IDF/Middle East EyeTanques en movimiento...
El Shin Bet ha afirmado que el grupo llevó a cabo cientos de pequeñas operaciones en nombre de Teherán, la mayoría de ellas centradas en fotografiar y vigilar emplazamientos militares sensibles, incluso las ubicaciones de las baterías de la Cúpula de Hierro.
Al parecer, espiaron el cuartel general de defensa de Kirya, en Tel Aviv, y las bases aéreas de Nevatim y Ramat David, junto con otras bases de las Fuerzas de Defensa de Israel.
Algunos de estos mismos emplazamientos fueron blanco del ataque con misiles balísticos de Irán del 1 de octubre, o bien también han sido blanco de cohetes de Hezbolá desde el norte.
Al parecer, las tareas también incluían el intercambio de mapas con sus superiores iraníes, en los que se detallaba la ubicación de emplazamientos militares. Se trata de uno de los «casos más graves» de espionaje relacionado con Irán que se recuerdan.
Times of Israel escribe:
"A cambio de sus acciones, los sospechosos recibieron cientos de miles de dólares, algunos de ellos en criptomoneda, dicen los investigadores. Todos ellos han llevado a cabo actividades de espionaje desde el comienzo de la guerra».Uno de los lugares sobre los que se cree que el grupo de presuntos espías pasó información a los iraníes es la base de entrenamiento de la brigada Golani, que la semana pasada fue alcanzada por un avión no tripulado de Hezbolá. Cuatro soldados murieron y docenas resultaron heridos cuando un dron kamikaze se estrelló contra un comedor abarrotado mientras las tropas cenaban.
En los últimos años ha habido múltiples ejemplos de operaciones de la inteligencia israelí en suelo iraní, ya sea para asesinatos o acciones de sabotaje nuclear, pero mucho más raro es oír hablar de operaciones de la inteligencia iraní llevadas a cabo dentro de Israel.
Mientras tanto, Estados Unidos se esfuerza por averiguar la fuente de una reciente filtración de documentos de inteligencia altamente clasificados relacionados con los preparativos de Israel para atacar Irán...
El Shin Bet ha dicho que el grupo llevó a cabo cientos de pequeñas operaciones en nombre de Teherán, la mayoría centradas en fotografiar y vigilar emplazamientos militares sensibles, incluso las ubicaciones donde están colocadas las baterías de la Cúpula de Hierro.
Al parecer, espiaron el cuartel general de defensa de Kirya, en Tel Aviv, y las bases aéreas de Nevatim y Ramat David, junto con otras bases de las Fuerzas de Defensa de Israel. Algunos de estos mismos emplazamientos fueron blanco del ataque con misiles balísticos de Irán del 1 de octubre, o también han sido blanco de cohetes de Hezbolá desde el norte.
Al parecer, las tareas también incluían el intercambio de mapas con sus superiores iraníes, en los que se detallaba la ubicación de emplazamientos militares. Se trata de uno de los «casos más graves» de espionaje relacionado con Irán que se recuerdan.
«A cambio de sus acciones, los sospechosos recibieron cientos de miles de dólares, algunos de ellos en criptomoneda, dicen los investigadores, que señalan además que todos ellos han llevado a cabo actividades de espionaje desde el comienzo de la guerra.»Uno de los lugares sobre los que se cree que el grupo de presuntos espías pasó información a los iraníes es la base de entrenamiento de la Brigada Golani, que la semana pasada fue alcanzada por un avión no tripulado de Hezbolá. Cuatro soldados murieron y docenas resultaron heridos cuando un dron kamikaze se estrelló contra un comedor abarrotado mientras las tropas cenaban.
En los últimos años ha habido múltiples ejemplos de operaciones de la inteligencia israelí en suelo iraní, ya sea para asesinatos o acciones de sabotaje nuclear, pero mucho más raro es oír hablar de operaciones de la inteligencia iraní llevadas a cabo dentro de Israel.
Mientras tanto, EE.UU. se esfuerza por averiguar la fuente de una reciente filtración de documentos de inteligencia altamente clasificados relacionados con los preparativos de Israel para atacar Irán
El mes pasado se produjo un importante incidente de presunto espionaje. En aquel momento, la policía israelí identificó a Moti Maman, de 73 años y natural de Ashkelon , como un agente de los servicios de inteligencia iraníes. Al parecer, se mostró dispuesto a llevar a cabo una campaña de asesinatos en Israel a instancias de sus superiores iraníes.
Maman, judío israelí, fue acusado de aceptar recibir un millón de dólares en total de la inteligencia iraní si se llevaban a cabo asesinatos de algunos altos cargos israelíes. Se dice que utilizó como tapadera sus frecuentes viajes como hombre de negocios a Turquía y a la región.
Comentario: ¿Precursor del 11-S israelí?