© NASA's Earth ObservatoryLos astronautas obtuvieron una vista de los polos mucho mejor que ésta.
El lunes, SpaceX hizo historia en el espacio, ya que cuatro astronautas fueron lanzados a una órbita polo a polo no recorrida por ningún humano antes que ellos. Pero, ¿por qué esta órbita es tan inusual, y por qué nadie lo ha hecho antes?
Aunque la misión Fram2 es privada y se realiza por encargo del multimillonario de la criptomoneda Chun Wang, la tripulación tiene algunas tareas científicas.
«Durante su misión de varios días, Dragon y la tripulación explorarán la Tierra desde una órbita polar y sobrevolarán las regiones polares de la Tierra por primera vez», explica SpaceX. «También llevarán a cabo 22 [experimentos] de investigación diseñados para ayudar a avanzar en las capacidades de la humanidad para la exploración espacial de larga duración y la comprensión de la salud humana en el espacio». A lo largo del tiempo en órbita de Fram2, la tripulación tiene previsto tomar la primera radiografía en el espacio, realizar estudios de ejercicio para mantener la masa muscular y esquelética, y cultivar setas en microgravedad.»
© Space XFram2 está comandado por el inversor en bitcoin de origen chino Chun Wang, al que se han unido la comandante del vehículo, la noruega Jannicke Mikkelsen, la piloto Rabea Rogge, de Alemania, y el oficial médico y especialista en misiones australiano Eric Phillips.
«Las primeras horas en microgravedad no fueron precisamente cómodas. El mareo espacial nos afectó a todos: sentimos náuseas y acabamos vomitando un par de veces. Era diferente al mareo en el coche o en el mar. Se podía seguir leyendo en el iPad sin que empeorara. Pero incluso un pequeño sorbo de agua podía revolverte el estómago y provocarte el vómito», escribió Chun Wang en X.
«[La piloto Rabea Rogge] pasó algún tiempo en la radio de radioaficionado, estableciendo contacto con Berlín. Nadie pidió abrir la cúpula el primer día, todos estábamos concentrados en controlar el mareo. Tuvimos una noche de cine viendo nuestro propio lanzamiento y nos fuimos a dormir un poco antes de lo previsto. Todos dormimos muy bien».
Tras dormir, la tripulación pudo realizar algunas tareas, incluida la toma de las primeras radiografías en el espacio.
La principal «primicia» de esta misión fue que fueron las primeras personas en orbitar alrededor de los polos del planeta. Ningún otro ser humano lo ha hecho, sino que se orbita a lo largo o cerca del ecuador, aunque para algunos satélites la órbita polar es beneficiosa.
«Las órbitas polares son un tipo de órbita terrestre baja, normalmente entre 200 y 1000 km de altitud. Los satélites en órbitas polares suelen viajar alrededor de la Tierra de un polo al otro, más que de oeste a este. No es necesario que pasen exactamente por encima de los polos Norte y Sur; una desviación de 10 grados se considera una órbita polar», explica la Agencia Espacial Europea (ESA).
«Las órbitas polares son especialmente útiles para la cobertura global de la Tierra, ya que los satélites que orbitan "arriba" y "abajo" de la superficie terrestre pueden ver cada centímetro del planeta a lo largo del tiempo, ya que éste también gira por debajo».
Además, existen órbitas sincronizadas con el Sol, en las que los satélites coinciden con la rotación de la Tierra alrededor del Sol, pasando sobre el mismo lugar (por ejemplo, Slough) a la misma hora todos los días. Esto puede ser útil si, por ejemplo, se quiere observar el cambio de una región concreta de la Tierra a lo largo del tiempo.
La NASA y otras agencias espaciales evitan las órbitas polares para los humanos por varias razones, entre ellas el mayor riesgo para la salud de los astronautas que supone sobrevolar los polos y la radiación añadida que ello conlleva. Pero la principal razón por la que no lanzan astronautas en esta trayectoria es la economía y la rotación de la Tierra.
La Tierra gira a unos 1.600 kilómetros por hora en el ecuador. Lanzando de oeste a este, como hace la mayoría, se hereda este movimiento de la Tierra y se necesita menos empuje adicional para escapar de la gravedad terrestre y alcanzar la órbita.
«Esta velocidad terrestre disminuye a medida que uno se aleja del ecuador hacia el norte o el sur», explicó a Gizmodo Mike Gruntman, profesor de astronáutica de la Universidad del Sur de California. «La velocidad en tierra del lugar de lanzamiento del cohete contribuye así a la velocidad final de un vehículo espacial cuando se lanza en dirección este y, por tanto, se necesita menos propulsante y el cohete de lanzamiento es más pequeño».
Al lanzar en una órbita polo a polo, se pierde este impulso de velocidad y hay que depender más del costoso propulsante para alcanzar la órbita.
Tras convertirse en los primeros humanos en viajar en esta órbita inusual, se espera que la tripulación permanezca en el espacio entre 3 y 5 días antes de regresar a casa.
«Después de regresar a salvo a la Tierra, la tripulación planea salir de la nave espacial Dragon sin asistencia médica y operativa adicional», añade SpaceX, »ayudando a los investigadores a caracterizar la capacidad de los astronautas para realizar tareas funcionales sin asistencia después de duraciones cortas y largas en el espacio.»
James Felton
James Felton es un autor que ha publicado cuatro libros de historia del pop y ciencia. Está especializado en historia, ciencia extraña y cualquier cosa fuera de lo común.
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