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© DesconocidoJames Risen, el periodista víctima de persecución en "el país de la libertad"
"Una orden como esta representa una grave amenaza para la libertad de prensa y la protección de las fuentes. Asimismo, concierne a todo el gremio".

El Departamento de Justicia estadounidense viene presionando y usando todas sus estrategias para que el periodista James Risen, de The New York Times revele todas sus fuentes de información sobre el caso del ex agente de la CIA, Jeffrey Sterling.

El ex agente de la CIA es acusado de haber filtrado información confidencial a varios periodistas, entre ellos a James Risen. Para Risen, se trata de la cuarta comparecencia ante la justicia en circunstancias similares.

En el documento que recibió el periodista, el Departamento de Justicia considera a James Risen un testigo, y le pide revelar su información y sus fuentes ante el jurado.

"Forzar a James Risen a declarar, es querer amordazar a todo periodista que pueda publicar información clasificada y decidir qué debe o no aparecer en la prensa", declaró Reporteros sin Fronteras.

"Una orden como ésta, representa una grave amenaza para la libertad de prensa y la protección de las fuentes. Asimismo, concierne a todo el gremio, no sólo a James Risen. Ninguna fuente aceptará revelar información a la prensa sabiendo que no está protegida", declaró la organización Reporteros Sin Fronteras

El acusado declaró este jueves que seguirá luchando en este caso, debido a que es un claro abuso contra la libertad de prensa por parte del gobierno. Risen también comentó que desde que Barack Obama asumió el poder, son ya cinco los procesos contra presuntas fuentes apoyándose en la Espionaje Act (ley de espionaje); nunca antes un gobierno federal había alcanzado ese número.

A finales del 2005, Risen escribió un artículo para The New York Times, donde revelaba que la administración Bush recurría al espionaje telefónico de los ciudadanos estadounidenses fuera de todo marco legal.

Un mes después el periodista publicó un libro titulado: "State of War: The Secret History of the CIA and the Bush Administration" (Estado de Guerra: la historia secreta de la CIA y de la administración Bush).

Bush respondió pidiendo al Departamento de Justicia que abriera una investigación, con el fin de descubrir las fuentes del artículo publicado en The New York Times sobre el espionaje telefónico.

Como la investigación no prosperó, en 2008 la administración Bush citó al periodista para que declare ante un gran tribunal sobre el programa nuclear iraní mencionado en su libro, Risen se negó y el plazo de la citación expiró.

En 2010, ya en la administración Obama, el periodista volvió a ser citado y nuevamente se negó. La juez federal Leonie Brinkema invalidó la comparecencia.

En 2011 la administración federal volvió a pedir que se le citara, esta vez en el juicio de Sterling. La juez Brinkema rechazó una vez más la solicitud del gobierno federal.

En la segunda semana de octubre la magistrada rechazó otra moción de la administración Obama, que buscaba la revocación a su decisión sobre el juicio precedente.

Actualmente el gobierno federal apela a ésta última decisión. Reporteros sin Fronteras pide al Departamento de Justicia que retire la apelación presentada el 19 de octubre de 2011.

"La administración federal demuestra una total incoherencia. No puede exigir que un periodista traicione a sus fuentes". "El Secretario de Justicia, Eric H. Holder, debe dar explicaciones públicamente sobre este punto. Le pedimos, en estas condiciones, que anule cuanto antes la citación enviada a James Risen", agregó Reporteros sin Fronteras.

La ONG también pide que se esclarezcan los cargos contra Bradley Manning, sospechoso de haber filtrado a Wikileaks el "famoso video filmado en Bagdad en julio del 2007", donde se ve claramente cómo el ejército estadounidense dispara contra un equipo de periodistas de la agencia Reuters.