Un total de 17 aldeas que reúnen a más de 5.500 indígenas en el distrito de Puerto Pinasco, en el departamento de Presidente Hayes, se encuentran completamente aislados desde hace un mes a causa de inundaciones. Líderes de estos grupos se acercaron hasta Benjamín Aceval para pedir ayuda para la situación de emergencia que están pasando.

En Benjamín Aceval, se lleva a cabo desde este lunes y hasta el miércoles la reunión de líderes indígenas sobre vida y derechos de sus pueblos y es allí donde Víctor Navarro, Secundino Torres y Alejandro Recalde expondrán el problema del aislamiento por la inundación.

Estas 17 aldeas están ubicadas a 440 kilómetros de Asunción, y desde la ruta Transchaco, a 120 kilómetros. Los líderes cuentan que con muchas dificultades han podido salir de sus asentamientos para llegar a la reunión.

Suponen que la inundación es producto de la crecida del río Pilcomayo, y les afecta directamente mediante el riacho González que pasa a través de sus aldeas, y el agua notoriamente no deja de avanzar, por lo que es sumamente necesario actuar rápidamente.

"Quedamos muy mal, es difícil salir y las cosas se complican porque no tenemos dinero ni alimentos", dice Recalde. El aislamiento puede tornarse aún mayor porque las aguas van acercándose a los caminos y a la ruta, y se ven obligados a movilizarse en canoas.

Sus chacras, su fuente de trabajo y de alimentación se encuentran completamente destruidas. También se preocupan por los niños que tienen que empezar las clases la próxima semana.

"El agua viene y no tenemos idea de qué dar de comer a nuestros hijos. Necesitamos víveres, trabajo", dijo Navarro. Temen también que si sucede algún accidente dentro de las comunidades o alguien se enferma no puedan asistirlo como tiene que ser por el aislamiento que sufren.

Los tres dicen que ya no tienen ni siquiera para movilizarse y pedir ayuda a instituciones como el Instituto Paraguayo del Indígena (Indi) o la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN).