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© la Prensa hnUn grupo de pobladores de Ceguaca, Santa Bárbara, observa el estado en que quedó el carro blindado después del asalto
En un inusual y sorprendente asalto de película, unos 15 hombres fuertemente armados utilizaron una retroexcavadora para atracar ayer al mediodía un carro blindado recolector de valores, del que se llevaron cuatro millones de lempiras y 200,000 dólares en efectivo, que en total suman 7.8 millones de lempiras, confirmó la Policía.

Los delincuentes encañonaron primero a un grupo de trabajadores de Soptravi, que trabajan en la carretera de Ceguaca, para quitarles la maquinaria pesada que utilizaron en el sorprendente asalto al vehículo blindado de la empresa Proval.

La unidad recolectora de valores salió de San Pedro Sula hacia Morazán, Yoro, a las ocho de la mañana con tres empleados: el chofer, un guardia y el encargado del manejo del dinero.

Al vehículo blindado lo custodiaba también un carro pick up de Proval, donde iban cuatro guardias.

En Morazán, Yoro, el carro de valores recogió un dinero de una institución bancaria y posteriormente salieron rumbo a Santa Bárbara.

Les cierran el paso

Cuando los dos carros de Proval iban por la comunidad de El Salado, en Ceguaca, los asaltantes encapuchados ya tenían listas en la carretera una volqueta y una retroexcavadora de Soptravi, para cerrarles el paso a ambos lados de la vía.

Cuando los dos vehículos de Proval llegaron al sitio, los asaltantes les descargaron una ráfaga de disparos a las llantas y les atravesaron la volqueta y la retroexcavadora. En ese momento, los cuatro guardias que iban en el pick up que custodiaban al blindado se enfrentaron a tiros con los delincuentes, resultado heridos los guardias Santos Rodríguez y José Gómez, con varios disparos en su piernas y manos.

"Vivimos una pesadilla"

Los delincuentes amarraron a los guardias y los encañonaron contra un paredón; los otros tres hombres quedaron dentro del blindado. Uno de los asaltantes subió a la retroexcavadora llevando encañonado al operador de la máquina, la cual primero le dio vuelta al carro de valores junto a los tres empleados adentro y después levantaba el brazo y lo dejaba caer contra el vehículo, enterrándole las uñas de metal hasta que lo abrieron. Después rompieron la caja fuerte con las uñas de metal de la máquina.

"Fue una pesadilla horrible la que vivimos, todo lo habían planificado bien porque a los maquinistas los tenían encañonados y los obligaron a hacer lo que hicieron", dijo uno de los empleados de Soptravi que omitió su nombre por razones de seguridad. "Aquí trabajan unas 20 personas, a todos nos encañonaron y nos obligaron a no seguir trabajando mientras ellos esperaban al carro blindado", agregó el testigo.

Después de destrozar el vehículo blindado y sacar el dinero en cinco bolsas blancas, los asaltantes huyeron del lugar en varios carros que fueron robados en la escena del asalto, entre ellos un vehículo rojo propiedad de Instituto Hondureño del Café, Ihcafé, que después lo dejaron abandonado en la aldea El Achote, jurisdicción de Las Vegas, Santa Bárbara. El carro blindado quedó destruido, su número de registro es 703, con placas, PCE-8331, y el carro pick up, color gris, con placas PCU 2863 y registro 905, fueron dejados en el lugar con varios impactos de bala.

Alcalde pide más policías

El alcalde de Ceguaca, Isidro Muñoz, lamentó este hecho y pidió más apoyo a la Policía, ya que se están asaltando a los caficultores y camiones repartidores en esta zona. "No podemos estar sin policías, no hay elementos en la posta, pedimos más apoyo al ministro de Seguridad, Óscar Álvarez", dijo Muñoz, quien le llevó agua a los guardias asaltados que estaban pasando la pesadilla y dando gracias a Dios por estar con vida.

El comisario Mesil Aguilar dijo que se montaron cordones de seguridad, cerrando todas las entradas y salidas del departamento; pero al mismo tiempo se reportaron varios robos de vehículos en el trayecto por el que huyeron los asaltantes, o sea que éstos cambiaron de carros varias veces y eso hace difícil detectar qué rumbo llevan, dijo Aguilar.