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La ONU ha anunciado recientemente que teme disturbios originados por la subida del precio de los alimentos básicos. En México, por ejemplo, se vive una crisis de las tortillas. No hay maíz y por lo tanto no hay tortillas, que son la comida nacional.

Muchos analistas se preguntan qué es lo que está pasando en el sector. Esta crisis alimentaria podría ir a más si se tiene en cuenta que en el año 2035 se pronostica que el mundo tendrá 9.000 millones de habitantes.

El Movimiento de campesinos Sin Tierra (MST) y la Vía Campesina resumen este fenómeno con varios puntos.

¿Por qué suben los alimentos básicos? ¿Cuáles son las causas?

Una de las causas que se apuntan es el control oligopólico que unas pocas empresas tienen del comercio agrícola mundial (soja, maíz, arroz, trigo, leche...). Estas corporaciones imponen un precio independientemente del costo real de producción con tal de maximizar sus beneficios.

Por otro lado, otro factor que influye en el alza del precio de los alimentos es la especulación de grandes inversores en las bolsas de mercancías agrícolas, que ha convertido a los alimentos en meros papeles de negocios. Cabe destacar que ya están vendidas en las bolsas las próximas siete cosechas de soja del mundo.

Con la crisis capitalista, muchos bancos han comenzado a invertir sus capitales volátiles en mercancías agrícolas, de manera que la llamada especulación financiera ha saltado a este sector.

Las élites demandan cada vez más carne, y por eso parte de la producción de vegetales, que podría ser consumida por la población, va para alimentar a los animales. Esto supone un elevado costo para transformar millones de toneladas de cereales en proteína animal.

También ha afectado el proceso privatizador de los servicios públicos para la agricultura, que han sido transferidos a empresas multinacionales.

En el caso de América Latina, durante el periodo de gobiernos neoliberales, se implementaron legislaciones ambientales de sanidad y certificados de patentes para favorecer el control oligopólico de algunas empresas que actualmente tienen poder para imponer precios.

La Organización Mundial del Comercio (OMC) aplicó en 1994 una regla general que transformó los alimentos en meras mercancías reguladas sólo por el mercado.

Además, la introducción de la propiedad privada de las semillas transgénicas impuso una nueva matriz tecnológica con costos de producción mayores y en beneficio de las mismas empresas que controlan el comercio, las semillas y los insumos agrícolas.

Así, los precios de los alimentos se internacionalizaron. Los parámetros de producción y de los precios no son más el costo real de producción de alimentos en cada país, sino que se establece un precio medio mundial, controlado por las empresas.