Se sabe que el vínculo entre el movimiento y el cerebro es fuerte. Un nuevo estudio aporta más datos.
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© Tyler Olson/fotolia.com
Una nueva investigación sugiere que mover las piernas es crucial para la salud del cerebro; de hecho, ejercitar los músculos de las piernas ayuda al cerebro a producir nuevas neuronas, según expone el trabajo publicado en la revista Frontiers in Neuroscience. Los hallazgos ayudarán a los investigadores a comprender mejor la progresión de las enfermedades neurológicas y de las neuronas motoras.

Ciertamente, tanto los astronautas como las personas que han estado postradas en cama por períodos prolongados experimentan muchos cambios físicos. Por un lado, ya sea debido a la falta de gravedad o al reposo en cama, los músculos tienden a encogerse. De hecho, la ciencia ha demostrado que la actividad muscular restringida afecta a toda la función neuromuscular.

El vínculo entre el movimiento y el cerebro es fuerte

Sabemos que la corteza motora del cerebro envía señales a la médula espinal para que músculos específicos se contraigan. Y, curiosamente, cuando algunas de las áreas cerebrales responsables del movimiento se dañan, el cerebro trata de "repararse" a través de la neuroplasticidad, es decir, la capacidad de las neuronas para reasignar sus conexiones, lo que hace que una parte diferente del cerebro tome el control.

Recientemente, cada vez más investigaciones se han centrado en el efecto de la actividad física voluntaria en la salud del cerebro. Por ejemplo, algunos estudios han demostrado que el ejercicio puede inducir neurogénesis, lo que significa que puede ayudar al cerebro a formar nuevas células nerviosas, y contrarrestar los efectos que el envejecimiento tiene sobre el hipocampo del cerebro, que es la clave del cerebro para la memoria y el tratamiento de la información.

Ahora, un nuevo estudio analiza cómo las células madre neurales se ven afectadas por el movimiento reducido de las piernas. Las células madre neurales son células madre indiferenciadas que se desarrollarán en neuronas u otras células cerebrales.

Los investigadores, dirigidos por Raffaella Adami, de la Università degli Studi di Milano (Italia) realizaron un experimento con ratones, restringiendo su movimiento durante un período de 28 días. Específicamente, las patas traseras de los roedores, pero no las frontales, estaban inmovilizadas. También contaron con un grupo de control de ratones que se podía mover libremente.

Esta pionera investigación muestra que la salud neurológica depende tanto de las señales enviadas por los músculos grandes de las piernas del cuerpo al cerebro como de las directivas desde el cerebro hasta los músculos

Al final del período de estudio, los científicos examinaron la región subventricular del cerebro, una zona clave para la salud de las células nerviosas (y el lugar donde las células madre neurales se diferencian en neuronas), descubriendo que la restricción de la actividad física reducía las células madre neurales en un 70%, en comparación con el grupo de control. Además, los ratones cuyo movimiento estaba restringido, tenían neuronas subdesarrolladas.

La conclusión principal de los nuevos hallazgos es que el ejercicio en las piernas, en particular el ejercicio con pesas, "le dice" al cerebro que produzca neuronas sanas, que son clave para nuestra capacidad para sobrellevar el estrés y los cambios en la vida.

El ejercicio debe ser del tipo que desafía la gravedad: bailar, caminar, correr, subir escaleras, jugar al tenis y levantar pesas son ejemplos de ejercicios de este tipo.

"La salud neurológica no es una calle de sentido único con el cerebro diciéndole a los músculos 'levántate', 'camina', y así sucesivamente" explica Raffaella Adami, líder del estudio.
"Nuestro estudio respalda la idea de que las personas que no pueden realizar ejercicios de carga, como pacientes postrados en cama o incluso astronautas en viajes prolongados, no solo pierden masa muscular, sino que su química corporal se altera a nivel celular e incluso su sistema nervioso se ve afectado negativamente ", concluye Adami.