Las agencias humanitarias de ONU y la Organización Mundial de la Salud (OMS) se preparan para hacer frente a un nuevo brote de ébola en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC).

trabajadores ébola
© Baz Ratner / Reuters
Estos nuevos casos detectados son probablemente de la cepa Zaire, la misma del brote anterior, y afecta a unos 10 lugares en torno al epicentro, la ciudad de Mangina, en la provincia de Kivu del Norte, cerca de la frontera con Uganda.

De acuerdo con la OMS, ya se confirmaron cuatro casos de ébola y se han registrado 20 muertes probablemente relacionados con la enfermedad.

Ese organismo intenta confirmar ahora si es la cepa Zaire, la misma que se produjo en la provincia Equateur y que es una de las de mayor tasa de letalidad, por encima del 50 por ciento o más, así explicó el responsable de la respuesta ante emergencias de la OMS, Peter Salama, quien destacó además el alto grado de dificultad para acceder a Kivu del Norte.
"Las organizaciones de la ONU tienen un acceso muy limitado a esa zona en conflicto y esto hace que sea muy difícil identificar todos los posibles contagios para llevar a cabo una vacunación en anillo", alertó.
Si es la cepa Zaire, precisó el especialista, podrá emplearse la misma vacuna ya utilizada en la provincia de Equateur.
"A diferencia de los brotes anteriores, este ocurre en un área de conflicto activo y la principal barrera será acceder de manera segura a la población afectada", recalcó.
Según indicó Salama, proteger a las personas vulnerables en el este de la RDC será un desafío muy complejo y la OMS trabaja estrechamente con el Gobierno para abordar rápidamente el brote.

El conflicto de larga data en esa región, que involucra a más de 100 grupos armados en el área de Kivu del Norte y en otros lugares, genera un nivel adicional de dificultad en la contención de la enfermedad mortal.

A consideración del directivo de la OMS, el conteo general de casos de ébola debe aumentar en los próximos días o semanas, en función de la trayectoria de la epidemia en esta etapa de su desarrollo.

La nueva alerta de ébola se planteó el 25 de julio, después de que una mujer y varios miembros de su familia fallecieran tras mostrar síntomas compatibles con la enfermedad.

Hacía alrededor de una semana, la OMS había declarado el último episodio de ébola a unas dos mil 500 millas al oeste, en la provincia de Equateur. En ese momento, se desconocía la emergencia de salud pública en la provincia de Kivu del Norte.