Científicos británicos han logrado filmar cómo el sistema inmunológico humano mata bacterias en la sangre al hacer pequeños agujeros dentro de sus objetivos. El estudio ha proporcionado a los científicos una mejor comprensión de por qué nuestras células permanecen intactas durante el 'ataque'.

glóbulos rojos
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De acuerdo con los resultados de la investigación, publicados este lunes en la revista Nature Communications, al matar bacterias en la sangre nuestro sistema inmunológico actúa como una nanomáquina que puede abrir agujeros mortales en sus objetivos. Esos orificios tienen un diámetro de solo 10 nanómetros, aproximadamente 10.000 veces más pequeños que el grosor de un cabello humano.


Para este estudio, los investigadores del University College de Londres buscaron imitar la forma en que esos mortales agujeros son formados por el complejo de ataque de membrana (MAC, por sus siglas en inglés), utilizando un modelo de superficie bacteriana. Al rastrear cada paso del proceso, encontraron que poco después de que cada agujero comenzara a formarse, el proceso se detiene. Durante esta pausa, el sistema inmunológico puede determinar si la célula es dañina o amigable.

"Parece que estas nanomáquinas pueden esperar un momento y permitir que su posible víctima intervenga, en caso de que sea una de las propias células del cuerpo y no un insecto invasor, antes de asestar el golpe mortal", explicó uno de los autores del estudio, Edward Parsons.

Al mismo tiempo, los investigadores especifican que el proceso se detiene, ya que se necesitan 18 copias de la misma proteína para completar un agujero. Inicialmente solo hay una copia, que se inserta en la superficie bacteriana, después de lo cual las otras copias de la ranura de la proteína penetran mucho más rápidamente.

Para filmar el sistema inmunológico en acción, a una resolución de nanómetros por fotograma y en pocos segundos, los científicos utilizaron herramientas de microscopía de fuerza atómica. Este procedimiento utiliza una aguja ultrafina que permite sentir -en lugar de ver- moléculas en una superficie. Así, la aguja escanea repetidamente la superficie para producir una imagen que se refresca lo suficientemente rápido para rastrear cómo las proteínas inmunitarias se unen y cortan la superficie bacteriana.

Los científicos esperan que este estudio pueda guiar el desarrollo de nuevas terapias que aprovechen el sistema inmunológico contra las infecciones bacterianas, así como estrategias que reutilicen el sistema inmunitario para que actúe contra células renegadas por el cuerpo.