El Dr. Ted Noel es uno de los últimos en usar la lógica y la razón para argumentar que los cubrebocas no funcionan para detener la transmisión del virus en aerosol. Utiliza un dispositivo de vaporización y otros tipos diferentes de cubrebocas, incluyendo desechables y de tela, para ilustrar que el vapor atraviesa los cubrebocas.
Masks
"La transmisión en aerosol no se detiene con los cubrebocas", dice. "No se necesita un gran estudio. Todo lo que se necesita es un dispositivo de vapor. La transmisión en aerosol es más grande en tamaño que el aliento", sin embargo, traspasa fácilmente el cubrebocas.

Esta demostración ofrece evidencia visual de que los cubrebocas no son eficaces para combatir el SARS-CoV-2, que es el virus que causa el COVID-19.

Podría ser necesario utilizar dos o tres cubrebocas

Si un cubrebocas no es suficiente, The New York Times sugirió en enero de 2021 que es posible que utilizar dos cubrebocas ofrezca una mejor protección. "Utilizar dos cubrebocas no es necesario para todos", escribió el Times. "Pero para las personas con cubrebocas delgados o endebles, 'es posible lograr una mayor eficiencia al combinar varias capas para evitar que los virus ingresen a las vías respiratorias'".

Citaron comentarios de Linsey Marr de Virginia Tech, que recomendaban colocar dos tipos de cubrebocas o utilizar cubrebocas de tres capas para detener el ingreso de las partículas.

Solo hay un problema molesto. "En algún momento, 'corremos el riesgo de dificultar la respiración', dijo. Si se supera ese problema, parece lógico que si añaden suficientes capas, las gotas infecciosas no pueden traspasar, lo que dificulta su ingreso".

Marr y la coautora Monica Gandhi de la Universidad de California, dijeron que al estudiar docenas de materiales, la efectividad de la filtración varió desde menos del 10 % (espuma de poliuretano) hasta casi el 100 % en el caso de una bolsa de aspiradora. Pero en las pruebas en humanos que usaban cubrebocas caseros, solo tenían entre un 50 % y un 60 % de efectividad para proteger a la persona de las partículas contaminantes.

Con base en sus propios estudios, Marr y Gandhi recomiendan "un cubrebocas quirúrgico de alta calidad o un cubrebocas de tela de al menos dos capas con un mayor número de hilos para una protección básica", pero, para una "mayor protección" es importante duplicar los cubrebocas o usar una variedad de tres capas:
"Para una mayor protección, las personas pueden (1) usar un cubrebocas de tela ajustado encima de un cubrebocas quirúrgico donde este actúa como un filtro y el cubrebocas de tela ofrece una capa adicional de filtración; o (2) usar un cubrebocas de tres capas con capas externas que consisten en una tela flexible, de tejido apretado que puede adaptarse bien a la cara y una capa intermedia que consiste en un material de filtro de alta eficiencia (como el material de la bolsa de aspiradora).

Si los cubrebocas se ajustan de manera adecuada, estas combinaciones deberían generar una eficiencia general de >90 % para partículas de 1 µm o más, lo que corresponde al tamaño de las partículas en aerosol que son las más importantes para mediar la transmisión del COVID-19".
Pero utilizar cubrebocas que proporcionen una buena filtración, o usar más de dos a la vez, puede tener consecuencias señaló el Times, al destacar que cubrirse la boca y la nariz con múltiples capas de tela y material de filtración podría dificultar la respiración normal".

El COVID-19 se propaga a través de partículas en aerosol

Además, existe evidencia de que la transmisión por partículas de aerosol está involucrada en la propagación del SARS-CoV-2, el cual tiene un tamaño de 0.125 μm. El viernes 18 de septiembre de 2020, los CDC publicaron una guía actualizada del COVID-19 en su página: "How COVID-19 Spreads" que, por primera vez, habló sobre la transmisión del SARS-CoV-2 por partículas de aerosol, al decir que "se cree que este es la forma principal en la que se propaga el virus".

Pero el lunes 21 de septiembre, los CDC eliminaron la mención de la propagación por medio de aerosoles y la posibilidad de propagación más allá de 6 pies, al igual que dijeron que "por error" se publicó una versión preliminar de los cambios propuestos.

Es una diferencia notable, porque si el SARS-CoV-2 se propaga a través de partículas en aerosol, según la investigación, dichas microgotas permanecen en el aire durante casi tres horas y pueden viajar distancias de hasta 27 pies. Esto se suma a la probabilidad de que los cubrebocas de tela no evitan la propagación del COVID-19. AAPS explicó:
"La evidencia científica respalda que las partículas en aerosol son muy importantes para la transmisión del SARS-CoV-2. Años de estudios de dosis-respuesta demuestran que si una persona está expuesta se infectará. Por lo tanto, cualquier protección respiratoria o cubrebocas debe proporcionar un alto nivel de filtración y ser muy efectivo para prevenir la transmisión del SARS-CoV-2".
Los cubrebocas no reducen la tasa de infección por COVID-19

En el primer ensayo controlado aleatorio de más de 6000 personas para evaluar la efectividad de los cubrebocas quirúrgicos contra la infección por SARS-CoV-2, se descubrió que no reducían la incidencia de la infección. Entre las personas que usaban cubrebocas, el 1.8 % obtuvo un resultado positivo al SARS-CoV-2, en comparación con el 2.1 % del grupo de control.

Cuando retiraron a las personas que reportaron no seguir las recomendaciones de uso, los resultados fueron los mismos: 1.8 % (40 personas), lo que sugiere que seguir estas recomendaciones no hace ninguna diferencia. Entre los que reportaron usar un cubrebocas "como se les indicó", el 2 % obtuvo un resultado positivo para el SARS-CoV-2 en comparación con el 2.1 % de los controles.

Una investigación de casos y controles de personas con COVID-19 que visitaron 11 centros de atención médica en los Estados Unidos, también reportó pocos beneficios. El informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos demostró factores relacionados con la aparición de la enfermedad, incluyendo el uso de cubrebocas normales o de tela en los 14 días antes de enfermarse.

La mayoría de ellos (70.6 %) informó que "siempre" usaban cubrebocas, pero aun así se enfermaron. Además, es posible que los cubrebocas de tela que utilizan la mayoría de las personas tengan una porosidad de 80 a 500 μm, que es mucho mayor que el tamaño de los virus o de incluso las gotitas respiratorias, que varían de 5 a 10 μm.

Los investigadores que escribieron en PeerJ explicaron que los cubrebocas de tela tienen una "menor eficiencia de filtrado" debido a su porosidad; esto empeoró aún más después de que se lavaron. La eficiencia de filtrado disminuyó hasta un 20 % después de que se lavaron y se secaron cuatro veces.

Reseña de políticas: los cubrebocas no tienen ningún efecto en la transmisión de la influenza

En mayo de 2020, los investigadores revisaron la evidencia de las medidas de protección personal contra la influenza pandémica, incluyendo 10 estudios que analizaron la efectividad de los cubrebocas para reducir las infecciones por el virus de la influenza en la comunidad. "No encontramos menores tasas de transmisión de la influenza con el uso de cubrebocas", escribieron, al citar la siguiente investigación:
  • Durante la peregrinación del Hajj en Australia, no se encontraron diferencias significativas en la infección por influenza entre las personas que usaban cubrebocas y las que no
  • Dos estudios que analizaron a estudiantes universitarios que vivían en la residencia universitaria, no encontraron menores tasas de los casos de influenza entre el grupo de personas que usaba cubrebocas
  • En un estudio sobre la transmisión de la influenza, utilizar cubrebocas no redujo las tasas de infección secundaria por el virus de la influenza
Aunque los investigadores sugirieron que podría existir algún beneficio de usar cubrebocas ajustados que estén debidamente probados, los cubrebocas holgados, como los desechables, tienen muchas menos probabilidades de proteger e incluso podrían aumentar el riesgo de transmisión:
"Existen pocas pruebas sobre su eficacia para prevenir la transmisión del virus de la influenza, ya sea cuando la persona está infectada o cuando lo usan personas no infectadas para evitar la exposición. Nuestra revisión sistemática no encontró ningún efecto significativo de los cubrebocas en la transmisión de la influenza confirmada por el laboratorio".
Existen más casos en áreas donde exigen el uso de cubrebocas

Los mandatos sobre el uso de cubrebocas se extendieron a pesar de la falta de pruebas sólidas que respaldaran su uso entre la población general. Con el fin de recopilar más información, los científicos, asesores y analistas de Rational Ground analizaron los casos de COVID-19 desde el 1 de mayo de 2020 hasta el 15 de diciembre de 2020 en los 50 estados de los Estados Unidos.

Calcularon el número de casos por día que ocurrieron en la población con y sin exigencia de cubrebocas. Entre los estados que no impusieron el uso de cubrebocas, se contabilizaron 5 781 716 casos. Esto funciona de la siguiente manera:
  • Estados que no exigieron el uso de cubrebocas: 17 casos por cada 100 000 personas por día
  • Estados que exigieron el uso de cubrebocas: 27 casos por cada 100 000 personas por día
En resumen, existen más casos en áreas que exigen el uso de cubrebocas. Como señaló Daniel Horowitz, editor principal de The Blaze:
"Podemos darle muchas vueltas, pero no importa cómo los examinemos, no existe evidencia de que los cubrebocas se relacionen con una menor propagación. En todo caso, es evidente que el virus actúa de forma natural y sigue un patrón muy mecánico sin importar las políticas estatales".
Un documento publicado por la Oficina Nacional de Investigación Económica encontró que, para todos los países y estados evaluados, una vez que la región experimentó 25 muertes acumuladas por COVID-19, las tasas de crecimiento de las muertes diarias disminuyeron a cerca de cero en 20 a 30 días.

Esto ocurrió sin importar el tipo de intervenciones que se llevaron a cabo, incluyendo el uso de cubrebocas, restricciones de viaje, solicitudes para permanecer en casa, confinamientos y cierres comerciales. "Estas medidas han variado en su momento entre países y estados, pero no en los resultados", reportó el American Institute for Economic Research.

¿En realidad tenemos que usar cubrebocas?

Muchas personas consideran que utilizar un cubrebocas debería ser una elección personal, pero la mayoría de los estados y ciudades de los Estados Unidos han solicitado su uso de manera obligatoria. Algunas empresas privadas también lo han hecho. Este no es un caso de "es mejor que nada", ya que algunas investigaciones sugieren que podría provocar daño físico y psicológico.

Aunque es posible que se vea obligado a usar un cubrebocas para ingresar a ciertos lugares, si vive en un área que solicita el uso de cubrebocas, por lo general existe una advertencia que dice que "a menos que pueda mantener una distancia de 6 pies". Si puede mantener esta distancia, puede renunciar a utilizarlo y aún así estar en cumplimiento con el mandato.