Las llamas, que se iniciaron de madrugada, quedaron controladas por la tarde sin causar peligro a los vecinos.Las fuertes rachas de viento de poniente complican la extinción que ocupa aún a 100 bomberos y 9 aviones.

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La tormenta de verano que descargó con fuerza en la madrugada del martes en el litoral castellonense y la comarca del Maestrat ha tenido graves consecuencias. Un rayo, de los más de 2.000 que cayeron, provocó un incendio en el parque natural de la Serra d´Irta, en Alcossebre, que ya ha arrasado 10 hectáreas de vegetación. Las llamas, que se propagaron a gran velocidad por las fuertes rachas de viento de poniente, quedaron controladas en la tarde de ayer, pese a que más de 100 bomberos y brigadistas se encontraban aún a última hora de la noche trabajando para lograr extinguirlo.

Más de 100 personas entre brigadas de emergencias, bomberos, coordinadores y mandos se desplegaron en la zona, pero fueron los medios aéreos, cinco aviones Air Tractor y cuatro helicópteros, el principal apoyo para evitar que el fuego avanzase de forma descontrolada. En apenas 15 horas, los bomberos consiguieron acotar las llamas permitiendo su evolución dentro de unas líneas de control establecidas y finalmente apagarlas, por lo que no hubo que temer por la vida de los residentes en las urbanizaciones de montaña próximas al incendio, tal y como confirmaron a Mediterráneo fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos.

Las columnas de humo eran visible desde numerosos puntos de Alcossebre y Alcalà de Xivert, un hecho que motivó que los vecinos se preocuparan y acudieran hasta el centro de mando, ubicado en la zona de El Pinar, cerca de la ermita de Santa Llùcia, preocupados por las llamas. Así, María Martínez confesó estar "aterrorizada". Y explicó: "Nos ha entrado el terror al ver el fuego porque estamos enamorados de esta zona, un entorno que es único en España, y ahora que vemos todo lo que está pasando solo tenemos ganas de ponernos a llorar".

Y es que el paraje del pico de Campanilles, de denso arbolado y afectado por el fuego, corona el parque natural de la Serra d´Irta a 573 metros de altitud sobre el nivel del mar, e inicia el barranco que discurre por dos sierras a pie de mar. En cuanto a flora destacan el palmito, única palmera endémica de Europa o el geranio de Irta, endémico de la sierra; y en cuanto a fauna destaca el cormorán moñudo o el halcón de Eleonor. Unas especies que se vieron ayer afectadas por las llamas.

Coordinación

Los bomberos de Orpesa, Benicarló y voluntarios de Llucena, que trabajaron en la extinción con 30 vehículos, contaron con el apoyo de la Guardia Civil de Alcalà de Xivert, con la presencia de sus mandos, y de la Policía Local de esta localidad bajo las órdenes del jefe Rubén Melià. También permanecieron durante todo el día muy pendientes de cada una de las actuaciones el concejal de Medio Ambiente de Alcalà de Xivert, Rafael Trujillo, y el teniente de alcalde delegado de Alcossebre, Ricardo Aguilar.