Nuevos hallazgos de NEOWISE, el segmento de la misión del telescopio espacial infrarrojo WISE especializado en la caza de asteroides y cometas, muestran que el cometa Hartley 2 deja un rastro de guijarros mientras da vueltas en torno al Sol, salpicado de granos tan grandes como pelotas de golf.

Cometa Hartley 2
© NASAHartley 2
Anteriormente, la misión de la NASA EPOXI, que voló sobre este cometa el pasado 4 de noviembre, ya observó desprendiéndose un flujo de partículas de hielo esponjoso de tamaños comprendidos entre pelotas de golf y balones de baloncesto.

Los datos de NEOWISE muestran que los pedazos del tamaño de bolas de golf sobreviven más lejos del cometa de lo que se pensaba, terminando en la estela de escombros que deja el cometa. El equipo de NEOWISE determinó el tamaño de estas partículas observando lo lejos que se desviaban de la estela. Las partículas más grandes tienen menos probabilidades de ser empujadas hacia afuera por la presión de la radiación del sol.

Las observaciones también muestran que el cometa expulsa activamente dióxido de carbono a una distancia de 2,3 unidades astronómicas del Sol, más lejos que los chorros detectados por EPOXI. Una unidad astronómica es la distancia media entre la Tierra y el Sol.

"Nos sorprendió que el dióxido de carbono juega un papel significativo en la actividad del cometa Hartley 2 cuando está más lejos del sol", dijo James Bauer, el autor principal de un nuevo estudio publicado en la revista Astrophysical Journal.