Traducido por el equipo de SOTT.net

La agencia turca de emergencias AFAD informó de un nuevo seísmo en el este del país, en el que se registró al menos una víctima mortal.
turkey earthquake tents
© Sercan Kucuksahin / Anadolu Agency via Getty ImagesVista aérea de un campamento de tiendas instalado en Malatya tras los seísmos del 8 de febrero.
Un nuevo terremoto mortal sacudió Türkiye hacia el mediodía del lunes, según informó la agencia nacional de ayuda en caso de catástrofe. Según informes preliminares, una persona ha muerto y otras 69 han resultado heridas en la provincia oriental de Malatya.

La agencia turca de gestión de catástrofes y emergencias AFAD indicó que el temblor tuvo una magnitud de 5,6 y el epicentro se situó en el distrito de Yesilyurt. Se estima que el seísmo se originó a una profundidad de unos siete kilómetros y pudo sentirse en las provincias vecinas, según la agencia de rescate.


Los primeros informes indican que más de 20 edificios han sido arrasados en la última catástrofe ocurrida en Turquía. Las imágenes que circulan por Internet muestran el derrumbe de algunas de las estructuras.

Unas 20 personas, incluidas las rescatadas de entre los escombros, fueron trasladadas al hospital tras el siniestro, según declaró el ministro de Educación Nacional, Mahmut Ozer, a la agencia de noticias Anadolu. La operación de búsqueda y rescate continúa, según AFAD.

Malatya fue una de las provincias turcas más afectadas por los seísmos gemelos del 6 de febrero, que se cobraron más de 50.000 vidas en Turquía y Siria y causaron daños masivos en ambas naciones. Muchos edificios quedaron debilitados por la catástrofe inicial, lo que aumentó el riesgo de que se derrumbaran en temblores posteriores.

Cientos de réplicas siguieron al golpe inicial en las semanas siguientes, algunas letales por derecho propio. El pasado lunes por la noche, varias personas murieron y cientos resultaron heridas tras el impacto en la ya devastada provincia de Hatay.

Türkiye está situada en una zona por la que pasan varias fallas geológicas, lo que hace al país vulnerable a los fenómenos sísmicos. Tras la catástrofe de este mes, los científicos advirtieron de que el riesgo de que un seísmo de fuerza similar se produzca cerca de la ciudad de Estambul aumenta con el tiempo. La ciudad más poblada del país experimentó un periodo de rápida urbanización en las últimas décadas, pero la seguridad de los edificios recién construidos sigue en entredicho.

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció el lunes que el gobierno "hará todo lo necesario para preparar todas nuestras ciudades para las catástrofes". No permitirá la construcción de edificios altos en las zonas dañadas por los seísmos y prohibirá toda construcción cerca de las fallas geológicas, dijo.