Un fuerte terremoto submarino ha provocado la huida de numerosas personas a tierras más altas en el oeste de Indonesia, tras activarse brevemente la alerta de tsunami.
Las sacudidas se sintieron en distritos y ciudades de las provincias de Sumatra Occidental y Sumatra Septentrional, y en algunos lugares se ordenó la evacuación a terrenos más elevados.
Los residentes de algunas zonas de la provincia de Sumatra Occidental, incluida la capital provincial de Padang, sintieron el seísmo con fuerza durante unos 30 segundos, declaró el portavoz de la agencia de catástrofes Abdul Muhari.
"Muchos residentes en varios pueblos de la isla de Mentawai optaron por permanecer (...) en terrenos más elevados aunque se había dado por finalizada la alerta de tsunami, por temor a réplicas", declaró, añadiendo que las autoridades seguían recabando información sobre los daños.
El seísmo, de magnitud 7,1, tuvo su epicentro a 170 kilómetros al sureste de Teluk Dalam, localidad costera de la región de Nias Meridional, en Sumatra Septentrional, a una profundidad de 15 kilómetros, según el Servicio Geológico de Estados Unidos. Las réplicas alcanzaron una intensidad de 5,8.
Tras una alerta inicial de tsunami, la Agencia de Meteorología, Climatología y Geofísica de Indonesia levantó la alerta justo antes del amanecer, unas dos horas después del seísmo.
Las autoridades dijeron que, según las observaciones del nivel del mar, se detectaron tsunamis menores de 11 centímetros en la zona costera de Tanah Bala, en la regencia de Nias del Sur.
Indonesia, un vasto archipiélago de 270 millones de habitantes, sufre con frecuencia terremotos, erupciones volcánicas y tsunamis. En noviembre, un seísmo de magnitud 5,6 mató al menos a 340 personas y dañó más de 62.600 viviendas en algunas zonas de Java Occidental.
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