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El paso del huracán 'Irene' por la Costa Este estadounidense ha provocado ya la muerte de once personas en los estados de Carolina del Norte, Virginia, Florida y Maryland y ha dejado a 3,6 millones de viviendas sin suministro eléctrico.

El huracán, ahora rebajado a la categoría de tormenta tropical, ha azotado este domingo Nueva York y ha provocado inundaciones en la parte baja de Manhattan y en el noreste de la ciudad, pero parece que lo peor ya ha pasado, ya que 'Irene' ha perdido gran parte de su fuerza a medida que avanzaba hacia el norte.

"Ahora podemos decir que lo peor de la tormenta que podía afectar a Nueva York y Nueva Jersey ya ha pasado", ha afirmado la secretaria del Interior de Estados Unidos, Janet Napolitano.

Napolitano ha explicado en rueda de prensa que los preparativos y precauciones adoptadas han permitido reducir drásticamente los daños personales y materiales, pero ha advertido de que la subida de los niveles de los ríos sigue suponiendo un riesgo para la población.

En Nueva Jersey los vecinos han informado de grandes olas, inundaciones en algunos barrios, numerosos sótanos inundados y árboles derribados por el temporal. "No es tan malo como decían. Las calles están inundadas, pero no es tan malo", ha declarado un residente de la ciudad que no quiso evacuar la zona, tal como habían ordenado las autoridades.

Ahora, mientras comienzan las labores de evaluación de los daños, la actividad comienza poco a poco a volver a la normalidad y Wall Street ha informado de que operará con normalidad el lunes.

Sin embargo, continúan vigentes las dudas sobre el complejo sistema de transporte público neoyorquino, paralizado por completo a raíz del temporal. Más de 8 millones de personas se mueven diariamente en el transporte público de la ciudad.