El jueves 7 de noviembre de 2024, Pemalang y Pekalongan, en Java Central, se vieron afectadas por condiciones meteorológicas extremas: lluvias torrenciales acompañadas de fuertes vientos y rayos, inundaciones y corrimientos de tierra.
Se produjeron inundaciones y corrimientos de tierras en Pekalongan y Pemalang debido a las fuertes lluvias que cayeron en las dos zonas de la costa de Java Central.
Según Indonesian Media Monitoring, el jueves cayeron fuertes lluvias sobre los distritos de Pemalang y Pekalongan desde el mediodía, lo que provocó desastres hidrometeorológicos en las dos zonas de la costa de Java Central.
Decenas de residentes, en medio de la lluvia torrencial, se vieron obligados a trabajar para limpiar el material rocoso y los desprendimientos de tierra.
Las inundaciones y corrimientos de tierra en el pueblo de Tundagan, distrito de Watukumpul, regencia de Pemalang, como consecuencia de las fuertes lluvias que caían sobre la zona, no sólo cerraron el merendero del pueblo, sino que también sumergieron una escuela primaria.
«Por suerte, los alumnos se habían ido de la escuela, así que no hubo víctimas», dijo Anggi, de 49 años, residente local.
Mientras tanto, en Pekalongan se produjo otro desastre por corrimiento de tierras: un acantilado de 100 metros de altura en el pueblo de Lembur, distrito de Kandangserang, regencia de Pekalongan, bloqueó la carretera del pueblo. Por ello, para entrar y salir del pueblo, los residentes se ven obligados a buscar desvíos de varios kilómetros.
«El corrimiento de tierras se produjo a las 12.00 WIB, las fuertes lluvias caídas en esta zona hicieron que los acantilados no pudieran soportar el agua vertida», declaró el jefe de la policía de Kandangserang, Ipda Slamet.
Aparte de los desprendimientos de tierra y rocas, continuó Slamet, las fuertes lluvias acompañadas de viento también provocaron la caída de varios árboles. Para abrir el acceso por carretera, los residentes, ayudados por varios agentes de policía y el TNI, bajaron a limpiar el material que cubría la carretera que conecta los pueblos.
Teniendo en cuenta que el estado de la colina aún puede dar lugar a nuevos desprendimientos, Slamet declaró que, junto con los organismos pertinentes, se estaba trabajando para garantizar la seguridad.
«Seguimos coordinándonos con los organismos relacionados y con el Gobierno de la Regencia de Pekalongan», añadió.
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