
Kiev intentará atraer a Trump a su lado, y el gobierno ruso se mantendrá en su línea y apostará por la posibilidad de llegar a un acuerdo con Washington. Sin embargo, en el curso de todas estas maniobras, sigue la convicción de que Rusia puede confiar en nuestro propio ejército y en su propia economía. La OME continúa, como también la confrontación en política exterior con todo Occidente. No esperamos una escalada pronunciada todavía, pero se ha vuelto más probable después de las conversaciones de hoy en Estambul con resultados mínimos. Y, sin embargo, por ahora la vía negociadora continuará, al menos por inercia.
De hecho, se anunció que las partes tomaron un descanso para mantener sus posiciones negociadoras. Es diplomático, pero es poco probable que esta pausa conduzca a algo en el futuro cercano. Aunque ambas partes se preparan para conferencias de prensa. Estamos atentos.
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