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Los diputados de la oposición chilena cumplieron con su palabra y rechazaron la partida educacional del proyecto de Ley del Presupuesto 2012, descalificada por el mundo social que le atribuye un sesgo privatizador.

La iniciativa legal del gobierno fue desestimada por 58 parlamentarios de los partidos de la Concertación (Socialista, Por la Democracia, Democracia Cristiana y Radical Social Demócrata) y a la bancada del Partido Comunista.

Los legisladores independientes votaron también contra el proyecto, favorecido por 54 votos de los exponentes de la alianza gobernante que integran los partidos Renovación Nacional y Unión Demócrata Independiente.

La votación tuvo lugar en horas de la madrugada, tras una extensa jornada en la que con 104 votos a favor, seis en contra y una abstención se dio luz verde a la idea de legislar en general sobre el proyecto de Ley de Presupuestos del Sector Público 2012.

En relación con el acápite educacional, el diputado socialista Marcelo Díaz opinó que la propuesta hecha por el gobierno sólo contiene ajustes cosméticos.

El presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, dijo que la norma presentada por el Ejecutivo se desentiende del papel de la educación pública y estatal para el desarrollo nacional.

Lo que se busca es la invariabilidad del sistema, con líneas orientadas a conservar y mantener el crecimiento de la educación privada y los rasgos centrales de esta, acotó.

A juicio del diputado chileno, la administración presidida por Sebastián Piñera se niega a hablar de gratuidad como la primera gran modificación conceptual que requiere el sistema educacional. La mera mención de becas evidencia falta de voluntad para abordar la problemática con criterio de solución, remarcó.

Hay un enfoque mercantilista en la partida para la enseñanza, no se quiere dar paso a los cambios estructurales que la sociedad reclama, enfatizó.

La cuestionada legislación será debatida y votada mañana en el Senado.