Ola de frío en Grecia
© Desconocido
Con fuertes heladas, nieve y temperaturas bajo cero despertaron el martes los griegos que tendrán que enfrentarse a graves problemas en las calles y carreteras de gran parte del país.

La temperatura más baja se registró durante la mañana en Alejandrópolis, en el este del país, donde los termómetros bajaron hasta los 10 grados bajo cero.

Precisamente las bajas temperaturas causaron ayer una víctima mortal en las inmediaciones de esta ciudad limítrofe con Turquía, perteneciente a un grupo de 15 personas que trataron de entrar en el país de manera clandestina cruzando a nado el fronterizo río Evros.

El inmigrante, de origen palestino, murió por congelación tras ser evacuado a un centro médico mientras que sus compañeros, africanos y asiáticos de varias nacionalidades, salvaron la vida gracias a que la crecida del río formó un pequeño islote en el centro del cauce.

También debido a la ola de frío los ayuntamientos de Atenas y de Tesalónica habilitaron algunos gimnasios, colegios y edificios públicos para acoger a las miles de personas que viven habitualmente en las calles de las dos principales ciudades del país.

Lo flota griega permanece atracada en puerto, lo que mantiene incomunicada a la población insular, después de que en la tarde de ayer un barco con 104 pasajeros a bordo encallara en aguas poco profundas en las cercanías del puerto de la isla de Thasou, al norte del país.

Los ocupantes pudieron ser rescatados y trasladados a tierra tras una operación de rescate que duró diez horas y en la que tuvieron que usar una de las grúas del puerto.

Numerosas carreteras permanecen cerradas por la nieve, incluso en la meridional isla de Creta, y en otras se obliga al uso de cadenas.

Igualmente en varias regiones del país las escuelas permanecen cerradas en espera del fin de un temporal que, según aseguran los meteorólogos, aún continuará mañana.