¿Sabías que la deficiencia de determinados nutrientes puede ser la que esté detrás de numerosos desequilibrios emocionales e incluso de la depresión? Mejora tu dieta para optimizar tu estado de ánimo.
depresión
La depresión es un trastorno del estado de ánimo. Se caracteriza por la aparición continua de sentimientos de tristeza, irritabilidad y una pérdida general del interés por las actividades cotidianas y la vida en general.

En la actualidad se considera un problema de salud pública, dado que es bastante frecuente en la población, en especial de los países desarrollados.

Hasta hace algunas décadas se pensaba que su aparición solo se daba por algunas situaciones emocionales.

No obstante, con el paso del tiempo, se encontró que se debe a variaciones en la química cerebral que pueden producirse por factores ambientales, cambios hormonales y genética.


Comentario: En este caso recomendamos ampliamente leer el siguiente artículo: La Depresión NO Es un Desequilibrio Químico en Su Cerebro - Aquí Está La Prueba


Además, se ha podido determinar que su desarrollo tiene mucho que ver con los hábitos de alimentación, ya que la deficiencia de algunos nutrientes aumenta la incidencia de padecerlo de forma recurrente.

Debido a esto, es primordial mejorar la dieta, y aumentar el consumo de aquellos alimentos cuyo valor nutricional ayuda a evitar y combatir este problema.

Con este fin, a continuación queremos compartir detalladamente esas 6 deficiencias que se han relacionado con su desarrollo.

¡Descúbrelas!

1. Ácidos grasos omega 3

Los alimentos ricos en ácidos grasos omega 3 le brindan múltiples beneficios al organismo y, de paso, a la salud emocional.

Su ingesta desempeña un papel clave en el desarrollo y funcionamiento del sistema nervioso central dado que controla la inflamación y regula su actividad.

También es clave para equilibrar la segregación de sustancias químicas en el cerebro y reducir el riesgo de envejecimiento prematuro.

Incluso, está recomendado como parte del tratamiento para la depresión, ya que aumenta la producción de serotonina mientras minimiza el exceso de cortisol.

Se puede obtener a través de:
  • Semillas y frutos secos
  • Legumbres
  • Huevos
  • Vegetales
2. Vitamina D

Carecer de vitamina D no solo aumenta el riesgo de padecer problemas óseos y articulares, sino que puede conducir a fuertes episodios de depresión y demencia.

Esta vitamina es clave en la segregación de serotonina, un neurotransmisor vinculado con el buen estado de ánimo y la felicidad.

La absorción correcta de este nutriente reduce el riesgo de desequilibrios emocionales y, a su vez, ejerce efectos positivos en el sistema inmunitario.

La forma más común de absorberla es con los rayos del sol, pero también se encuentra en alimentos como:
  • Cereales y productos de soja enriquecidos
  • Huevos
  • Champiñones
3. Zinc

El zinc es otro micronutriente que participa en la regulación de las emociones, estimulando algunas funciones neuronales y la actividad del sistema nervioso.

En niveles adecuados aumenta la producción de los neurotransmisores del bienestar.

A su vez, está implicado en más de 250 rutas bioquímicas independientes que tienen que ver con el funcionamiento de los órganos principales.

Los alimentos para corregir esta deficiencia incluyen:
  • Los huevos
  • Las legumbres
  • Las nueces
  • Las semillas
  • Los cereales integrales
  • Los lácteos orgánicos
4. Selenio

Este nutriente es esencial para un buen funcionamiento cerebral y el control de las bajas en el estado de ánimo.

Desempeña un papel relevante en la función de la glándula tiroidea que, a su vez, es esencial para una buena salud mental.

Su efecto antioxidante y reconstituyente es clave para la prevención y el tratamiento del trastorno depresivo.

Se puede obtener de:
  • Frijoles y guisantes
  • Huevos
5. Magnesio

Por desgracia para todos, el magnesio es uno de los minerales más difíciles de absorber en el organismo.

De hecho, se estima que muchas patologías físicas y mentales tienen que ver con la deficiencia de este nutriente.

En el tratamiento de la depresión tiene un papel principal, no solo porque aumenta la producción de serotonina y dopamina, sino también porque reduce la producción de cortisol.

Incrementa el consumo de:
  • Algas
  • Almendras
  • Aguacates
  • Plátanos
  • Frijoles
  • Semillas de calabaza
  • Cereales integrales
  • Salvado
  • Vegetales de hojas verdes
6. Hierro

La deficiencia de hierro es una de las principales causas de anemia, fatiga mental y trastornos depresivos.

Esto se debe a que es un componente esencial en el desarrollo y funcionamiento cognitivo y sensoriomotor.

Sus bajos niveles ocasionan una insuficiencia de células rojas en la sangre. Esta afecta la oxigenación celular e incrementa síntomas como el desequilibrio emocional, la fatiga y la confusión mental.

Para aumentar sus niveles es necesario comer:
  • Remolacha
  • Harina de avena
  • Espinacas y verduras verdes
  • Granadas
  • Huevos
  • Frijoles
  • Mantequilla de maní
Combatir las deficiencias mencionadas puede resultar clave en el tratamiento de aquellos pacientes con depresión y bajas emocionales.

No obstante, es necesario analizar otros aspectos para determinar cuál puede ser su origen y qué otras medidas se requieren.