La cifra representa un aumento del 19% en comparación con los últimos datos disponibles, del pasado viernes 27 de enero, que apuntaban a 101 casos confirmados del brote de esta enfermedad.
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Hasta ahora el brote se concentra en cuatro estados —Minas Gerais, Espírito Santo, Bahía y São Paulo— y se limita a la variante silvestre de la fiebre amarilla, que transmiten mosquitos y simios en zonas rurales a personas no vacunadas.
Comentario: No seria para nada extraño que después de esto se iniciara una costosa campaña de vacunación que termine con un incremento masivo de casos de enfermedad. Tal y como ocurrió casi hace un año con el virus del Zika.
La variante urbana de la enfermedad no se registró por el momento, aunque éste ya es el mayor brote desde el año 1980; el anterior se produjo el año 2000 con 85 casos.
Las autoridades están extremando las medidas de prevención en las zonas afectadas y según el ministerio ya se enviaron 7,5 millones de dosis extras de vacunas a los estados afectados.
Comentario: 7.5 millones de vacunas que pagó el pueblo de Brasil a una compañía farmacéutica. Es decir, alguien sacó ganancias a un brote espontáneo de un virus transmitido por un mosquito por segundo año consecutivo.